Luego de más de 20 días de paro y bloqueo en la zona de Santa Cruz de la Sierra, con una escalada de violencia y enfrentamientos que provocaron una muerte y varias detenciones, el Gobierno determinó este sábado la fecha del censo poblacional, motivo del conflicto.
Se fijó como fecha para el censo el 23 de marzo de 2024, pese a que los líderes del paro pedían que se efectúe en 2023, para que los datos obtenidos impacten en las elecciones generales de 2025.
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El presidente de Bolivia, Luis Arce, anunció la fecha en la madrugada del sábado, luego de una jornada de conflicto en la que 15 personas resultaron detenidas, y precisó que la distribución de los recursos se hará en septiembre de 2024.
Arce señaló que "algunas personas han politizado el proceso censal" que es algo "estrictamente técnico".
Una vez conocida la fecha, el Presidente de la Conferencia Episcopal Boliviana, Mons. Aurelio Pesoa Ribera, en nombre de los obispos reunidos en la 91° asamblea plenaria, reiteró el llamado a gobernantes y gobernados "a la cordura y a un diálogo sincero y fraterno" deponiendo intereses "ocultos e irracionales".
En la misma línea, los exhortó a sentarse "con verdadero y sincero deseo de resolver los problemas en espíritu de paz, de entendimiento y de serena fraternidad"
Por su parte, el Obispo de San Ignacio de Velasco, Mons. Robert Flock, instó en su homilía dominical, a que el Gobierno y el Instituto Nacional de Estadística pidan disculpas a la población por el retraso del censo.
El Prelado añadió que ambos deben cumplir su palabra, no solo con la fecha, sino con un cronograma definido.
"Entiendo que semejante garantía requiere no solo un nuevo decreto supremo, sino también una ley" que necesita tiempo para ser formulada, aprobada y promulgada, "pero lo importante es cumplir", sostuvo.
También señaló que preocupan los enfrentamientos entre los grupos de choque, la acción policial parcializada y afirmó que no debe haber más muertes ni heridas sociales.
"La violencia engendra más violencia y las turbas enardecidas son difíciles de calmar. Por este motivo es quizás hora de suspender los paros. Yo felicito a los que han sabido realizar las protestas de manera pacífica, con la olla común y con la oración", indicó.
La Pastoral de la Universidad Católica de Bolivia en Santa Cruz consideró que "la decisión oficial del censo para el 23 de marzo de 2024, en un momento de ánimos caldeados, puede resultar en un detonante para radicalizar las posiciones y agudizar la escalada de violencia".
En ese sentido, llamaron a las autoridades a aplicar actitudes y conductas que contengan "valores y principios constitucionales, así como la Doctrina Social de la Iglesia" para configurar el buen Gobierno y el perfil de la autoridad pública.
Este lunes se conoció la decisión de Santa Cruz de continuar con el paro indefinido, hasta que el Gobierno apruebe una ley que asegure la redistribución de recursos y asignación de bancas antes de las elecciones del 2025.
Además, otorgaron un plazo de 72 horas para que sean liberados los 20 detenidos en los enfrentamientos.