Cáritas Española, la entidad para coordinar la acción caritativa y social de la Iglesia en España, publica un informe en el que afirma que el 31,5% de los hogares españoles "no cuentan con un presupuesto que garantice unas condiciones de vida dignas".
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El trabajo, titulado "El coste de la vida y estrategias familiares para abordarlo", ha sido elaborado por Cáritas Española con la colaboración de la Fundación Fomento de Estudios Sociales y Sociología Aplicada (FOESSA).
Su principal aportación es la propuesta de un nuevo índice para medir las dificultades económicas de las familias que asocia los ingresos disponibles a las necesidades básicas concretas de cada hogar, que pueden variar según diversas circunstancias.
El llamado Presupuesto de Referencia para unas Condiciones de Vida Dignas contempla no sólo la alimentación, sino que hace referencia a ocho partidas básicas como la vivienda, los suministros (energía, internet), el acceso a la educación y el ocio, los gastos sanitarios o la atención a situaciones de dependencia.
De estas mediciones, resulta que seis millones de hogares "tiene unos ingresos muy por debajo de los que necesitarían para vivir en condiciones de vida dignas", explican desde Cáritas.
Según se detalla, esto supone que vive "con ingresos inferiores al 85% de su presupuesto de referencia" un 31,5% de los hogares en España. Este porcentaje es superior al ofrecido por otros índices como la tasa de pobreza relativa (20,7%) calculada por el Instituto Nacional de Estadística (INE) en 2019.
Para Cáritas, la realidad de estos hogares es "asfixiante" ya que se trata de "hogares con graves dificultades", entre los que se encuentran sobre todo los que viven de alquiler, tienen niños en edad escolar o personas con discapacidad o dependientes en su seno.
También están especialmente afectados aquellos con ausencia de ingresos estables, con parte o todos sus miembros sin trabajo y los que tienen que hacer frente a deudas. Al tiempo, la situación de las mujeres que viven solas con menores, afrontan especiales dificultades, según detalla Cáritas.
El informe expone cómo, con la crisis inflacionaria de los últimos meses, las partidas de gastos esenciales (vivienda, transporte y alimentación) para los más vulnerables podrían llevarse el 80% de los ingresos para aquellos hogares con menos de mil dólares mensuales.
Así, se apunta que las familias desarrollan de manera individual o combinada, diferentes estrategias de supervivencia como renunciar o reducir sus gastos en ropa y calzado (7 de cada 10) o recortar el gasto en alimentación (3 millones de hogares).
Según especifica Cáritas, al menos una cuarta parte de los hogares más vulnerables "no pueden llevar la dieta especial que necesita por cuestiones médicas" y casi 20 de cada 100 han renunciado al comedor escolar por no poder costearlo.
Por otro lado, 6 de cada 10 hogares han reducido el consumo de electricidad, agua o calefacción; la tercera parte de las familias más necesitadas renunciaron al uso de prótesis, gafas o audífonos y un 14% descartó comprar algún medicamento.
La secretaria general de Cáritas Española, Natalia Peiro, reclama políticas públicas que aborden la pobreza y la desigualdad rescatando a las familias que más padecen esta situación, pero también perfeccionando el sistema de protección social a largo plazo.