El gobernador de Oklahoma (Estados Unidos), Kevin Stitt, promulgó el martes una ley que bloquea los fondos federales destinados al Hospital Infantil de la Universidad de Oklahoma, a menos que deje de ofrecer el "cambio de sexo" o terapias hormonales a menores.  

"Al firmar este proyecto de ley hoy, estamos dando el primer paso para proteger a los niños de las cirugías y terapias permanentes de transición de género" dijo el gobernador Stitt el 4 de octubre.

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La autoridad cree que "es tremendamente inapropiado que los dólares de los contribuyentes se utilicen para tolerar, promover o realizar este tipo de procedimientos controvertidos en niños sanos".

Después de que los parlamentarios de Oklahoma expresaran preocupación, el hospital anunció el 27 de septiembre que suspendería algunos de los tratamientos de "transición género" o "cambio de sexo" antes de la firma del proyecto de ley.

Sin embargo, Stitt dijo que esto no era suficiente y pidió a la Legislatura de Oklahoma que prohíba este tipo de procedimientos en menores en todo el estado.

"Hago un llamado a la Legislatura para que prohíba todas las cirugías irreversibles de transición de género y las terapias hormonales en menores cuando se reúna la próxima sesión en febrero de 2023", dijo el gobernador.

Con la aprobación de la nueva ley más de 108 millones de dólares en fondos del American Rescue Plan (Plan de Rescate Estadounidense) dejarán de ser destinados al sistema de salud de la Universidad de Oklahoma.

Recientemente, tres importantes grupos médicos han pedido al Departamento de Justicia de Estados Unidos que investigue y procese a activistas y periodistas que informan sobre hospitales que realizan cirugías de cambio de sexo en niños.

La Asociación Médica Estadounidense (AMA), la Academia Estadounidense de Pediatría (AAP) y la Asociación de Hospitales Infantiles (CHA) solicitaron al fiscal general Merrick Garland que inicie una investigación el 3 de octubre.

En una carta, las organizaciones indican que las críticas a los hospitales infantiles que realizan este tipo de cirugías de género deben ser consideradas "ataques."

El Gobernador Stitt, por su parte, dijo que "no podemos hacernos de la vista gorda ante lo que está sucediendo en toda nuestra nación, y como gobernador lo haré".

"No permitiré cirugías de transición que alteren la vida de niños menores en el estado de Oklahoma", agregó.