Expertos en biología y psicología destacaron la importancia de la reconciliación personal en el camino de la vida cristiana, pues "ordena la vida y todas sus dimensiones según su fin último, la unión con Dios".
El psicólogo clínico católico Humberto Del Castillo Drago, fundador del Centro Areté y uno de los principales impulsores de la psicoterapia de la reconciliación, explicó que "cada ser humano lleva inscrito en su mismidad, una nostalgia de reconciliación, un anhelo infinito y de felicidad".
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"La persona humana anhela ser feliz, anhela la paz y armonía, tiene una nostalgia de libertad y permanencia, de seguridad y encuentro que no llega a saciarse sino en el encuentro con el Señor Jesús", destacó.
"Quien quiera crecer en su vida cristiana, está invitado a esforzarse por crecer en reconciliación personal, quien avanza en la reconciliación consigo mismo, avanza en su vida cristiana", añadió.
Por su parte, el magister Mauricio Vega Montoya, biólogo e integrante del Sodalicio de Vida Cristiana dedicado a la educación en Colombia, indicó que "toda persona humana anhela encontrar significado en su vida de forma permanente y espera, además, que ese significado lo plenifique".
"Sin embargo, el binomio significado y plenitud no se da automáticamente en la vida de una persona", precisó.
"Para que se dé cada uno de nosotros debe esforzarse por entrar en su interioridad para descubrir y acoger el significado que Dios ha impreso en nosotros", continuó.
Vega Montoya resaltó que "la búsqueda de significado implica, por tanto, acogida de la propia identidad personal. De alguna manera podríamos decir que cada quien tiene la obligación primera de recibirse a sí mismo".
"Nadie ha sido auto creado, sino que todos fuimos creados y, por lo tanto, nuestro primer acto de responsabilidad con nosotros mismos es acoger el misterio de nuestra personalidad humana creada por Dios", subrayó.
Para Vega Montoya, "el despliegue de nuestra personalidad requiere de constante esfuerzo y lucha para enfrentar tanto desafíos externos como internos".
"Muchos de esos desafíos han marcado rupturas o heridas interiores que no integramos en nuestra historia y representan un obstáculo para el desarrollo de nuestra personalidad", dijo.
"Es en este marco que se da la reconciliación personal", indicó, explicando que se trata del "proceso gradual de integración de la personalidad humana que se da durante toda la vida en el contexto social".
"Hay quienes pueden pensar que la reconciliación personal es individual. Sin embargo, no existe reconciliación personal sin comunión porque las personas somos esencialmente llamados a la comunión, como Dios es Comunión", precisó.
El Centro Areté, que desde hace más de 10 años profundiza en la reconciliación desde una perspectiva integral con la "Psicoterapia de la Reconciliación", comenzará una nueva edición de su diplomado virtual "Psicoterapia de la reconciliación" este 3 de octubre, que está especialmente dirigido para psicólogos y psiquiatras.
Para más información e inscripciones, puede ingresar a www.centroarete.org, o escribir a secadministrativa@centroarete.org
