El sacerdote cubano Alberto Reyes Pías, de la Arquidiócesis de Camagüey, dijo que se "puede esperar cualquier cosa" del nuevo Código de las Familias y criticó la posible promulgación de este paquete legislativo tras el referéndum del próximo 25 de septiembre.
"Al vivir en un sistema totalitario se puede esperar cualquier cosa con respecto al Código de las Familias. Este gobierno tiene todos los medios a su alcance y puede hacer lo que quiera con impunidad", dijo el sacerdote en una entrevista concedida a EWTN Noticias.
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El sacerdote católico aseguró que la Iglesia en Cuba no está "de acuerdo con la promulgación de este Código tal como está concebido", debido a que el paquete legislativo se vota "en bloque, es decir, o todo 'sí' o todo 'no'".
"La Iglesia espera que el gobierno sea capaz de promulgar leyes que realmente protejan a la familia y que respeten la autoridad de los padres sobre los hijos y su educación", agregó.
El 12 de septiembre de 2022, el Episcopado Cubano indicó que el Código se basa en ideología de género y permite que los menores tomen decisiones sin el consentimiento de sus padres en procesos clínicos y quirúrgicos.
De igual manera, alertó sobre la apertura a la adopción de parejas del mismo sexo, la reproducción humana asistida para homosexuales y la fecundación "in vitro" postmortem. Ya que con todo esto se quita al niño la posibilidad de crecer con la figura de un padre y una madre.
El P. Reyes dijo que la Iglesia en Cuba desea "que se emitan leyes que protejan a la familia".
No obstante, lamentó que el gobierno haya promovido durante años "misiones 'internacionalistas' donde mucha gente ha dejado a sus familias y se ha ido a otros países a buscar un poco de dinero".
"Como resultado, al volver, se ha destruido su familia al no haber aguantado la separación. Este gobierno ha promovido continuamente la migración, que separa a las familias", agregó
El sacerdote dijo que de llegarse a aprobar el Código, "solo le otorgará a la dictadura una herramienta más para hacer lo que quieran hacer sin ser cuestionados".
Respecto a que se apruebe la figura del vientre de alquiler, comentó que esta práctica "nunca se había planteado en Cuba".
"Creo que es algo bastante ajeno a nuestra cultura. Sin embargo, ante la miseria y precariedad es probable que muchas mujeres entren en esta práctica", dijo.
El P. Reyes subrayó que "con los hijos ni se juega ni es algo que está bien mercantilizar", porque "un hijo es un don y no la satisfacción de un capricho".
"Desconfío del gobierno cuando dice que el objetivo del Código de Familias es meramente 'altruista'. Este gobierno no es altruista porque no ha ayudado a las familias a mejorar su situación. Nos llama la atención también la insistencia en establecer en Cuba la ideología de género", concluyó.