El Arzobispo de San Juan de Puerto Rico, Mons. Roberto González Nieves, celebró la "excelente" comunión con la Conferencia Episcopal de Mons. Alberto Arturo Figueroa Morales, que sucede en el Obispado de Arecibo al destituido Mons. Daniel Fernández Torres.

En conferencia de prensa este 14 de septiembre, tras el anuncio del nombramiento hecho por el Papa Francisco, Mons. González Nieves y Mons. Figueroa Morales coincidieron en decir que la comunión entre los demás obispos puertorriqueños y el sucesor de Mons. Fernández Torres es "excelente".

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El nuevo Obispo de Arecibo continuó, indicando que "yo fui elegido para ser secretario general de la Conferencia Episcopal, y mi diálogo, mi trato con ellos es continuo, abierto, cercano, con eso no hay absolutamente ningún problema".

Al abordar el tema de la "obediencia al Papa", el Prelado señaló que esta "para nosotros como católicos es fundamental, porque él es quien preside desde Roma toda la Iglesia en la caridad".

"A él debemos nuestro afecto, nuestro cariño y nuestra obediencia filial. Obediencia de hijos, no obediencia de siervos o de esclavos sino de hijos, que escuchan la voz de este a quien el Señor le dio la responsabilidad de gobernar la Iglesia", añadió.

Mons. Alberto Arturo Figueroa Morales fue nombrado este 14 de septiembre por el Papa Francisco como nuevo Obispo de Arecibo, sucediendo así a Mons. Daniel Fernández Torres, a quien el Santo Padre destituyó el 9 de marzo de este año.

Hasta el reciente nombramiento, Mons. Figueroa Morales era Obispo Auxiliar de la Arquidiócesis de San Juan.

La Santa Sede no dio una explicación sobre la razón de la destitución de Mons. Fernando Torres, pero ACI Prensa pudo conocer que estaba relacionada con acusaciones de falta de comunión con los demás obispos de Puerto Rico.

Las tensiones en el Episcopado puertorriqueño habrían tenido su punto más alto en la defensa del hoy Obispo Emérito de Arecibo del derecho a la objeción de conciencia de los fieles católicos ante la vacunación obligatoria en un comunicado publicado el 17 de agosto de 2021, siguiendo las orientaciones difundidas más de medio año antes por la Congregación para la Doctrina de la Fe de la Santa Sede.

Días después, Mons. Fernández Torres se negó a firmar un comunicado conjunto de la Conferencia Episcopal Puertorriqueña que aseguraba que "hay un deber de vacunarse y que no vemos cómo pueda invocarse una objeción de conciencia desde la moral católica".

Sin proceso canónico previo, el Delegado Apostólico para Puerto Rico, Mons. Ghaleb Moussa Abdalla Bader, le habría pedido a Mons. Fernández Torres que firme su renuncia, a lo que el hoy Obispo Emérito se negó aduciendo razones de conciencia.

Al día siguiente de la destitución de Mons. Fernández Torres, el Arzobispo de San Juan aseguró en Twitter que la causa fue "insubordinación al Papa, única autoridad competente para tomar la decisión".

El Prelado ha negado las acusaciones de falta de comunión con el Episcopado puertorriqueño y de desobediencia al Papa Francisco, y en un documento titulado "Dios Siempre es Mayor", elaborado por sus asesores jurídicos, apunta a un papel protagónico del Arzobispo de San Juan en su destitución.

En la conferencia de prensa de este 14 de septiembre, el Arzobispo de San Juan dijo que el futuro de Mons. Daniel Fernández Torres en la Diócesis de Arecibo "en gran medida dependerá del diálogo" que tenga con su sucesor.

"Yo pienso que sí habrá posibilidades de alguna colaboración y trabajo", indicó, pero precisó que "también dependerá de directrices de la Santa Sede, porque en la Congregación de Obispos en Roma dan ciertas orientaciones y directrices para el desempeño de los obispos eméritos".

Mons. Roberto González Nieves aseguró que el actual Administrador Apostólico de Arecibo, Mons. Álvaro Corrada del Río, "ha sido muy generoso" con el Obispo Emérito, pues "le compró una casa, y le pasa el estipendio que recibía anteriormente".

"Se le ha dado un acompañamiento justo y fraternal", aseguró.

El nuevo Obispo de Arecibo pidió a los fieles de Arecibo "seguir moviéndonos adelante", pues "si nos quedamos en las razones para una cosa o para la otra, pues seguimos quizás abriendo heridas, afectando susceptibilidades".

"Yo creo y yo invito a todos a que miremos con confianza y esperanza en el futuro", expresó.

"El mayor reto es ir fortaleciendo los lazos de fraternidad que existen entre todos. Ha habido situaciones difíciles pero yo creo que lo bueno es más. y la gente y los sacerdotes están, entiendo y confío, deseosos de seguir trabajando, de seguir mirando hacia el frente", dijo.

Hacia el final de la conferencia de prensa, Mons. Alberto Arturo Figueroa Morales aseguró sentirse "muy tranquilo, muy sereno" y "confiando, como le dije en la carta de agradecimiento al Santo Padre, que si es la solicitud del sucesor de Pedro, para mí es la voluntad de Dios".