El Vicariato Apostólico de San Andrés y Providencia (Colombia) reinauguró el fin de semana cuatro templos que fueron destruidos por el huracán Iota en noviembre de 2020.
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Iota pasó cerca del archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina del 15 al 16 de noviembre como huracán de categoría cuatro.
El huracán pasó a unos 18 kilómetros de distancia de la isla de Providencia, pero la tormenta causó daños en el 98% por ciento de las infraestructuras, y dejó un fallecido y seis heridos.
Además, la destrucción dejó a unas cinco mil personas damnificadas, por lo que muchas fueron alojadas en las iglesias católicas.
A casi dos años, gracias a las donaciones de la Iglesia en Colombia e instituciones católicas extranjeras, el Vicariato Apostólico terminó de reconstruir en la isla Providencia dos parroquias y dos capillas.
En ese sentido, el domingo 28 de agosto, el Vicariato liderado por Mons. Jaime Uriel Sanabria Arias, informó que fueron reinauguradas las parroquias Nuestra Señora de los Dolores y Nuestra Señora del Carmen, y las capillas de la Santa Cruz y María Reina de Los Ángeles, cuyos altares fueron consagrados.
En su página de Facebook, el Vicariato Apostólico recordó que la parroquia Nuestra Señora de Los Dolores "sirvió como refugio para los damnificados del huracán Iota".
Asimismo, expresó el agradecimiento de los fieles a los sacerdotes Benito Huffington, párroco de Nuestra Señora de los Dolores; y Jaime Escudero, párroco de Nuestra Señora del Carmen, "quienes después del huracán Iota siguieron al frente de sus comunidades y no los abandonaron en ningún instante, velando por el rebaño al estilo de Jesús, el Buen Pastor".
"En este día en que se han consagrado los altares de nuestros templos, agradecemos a Dios por su entrega generosa en medio del pueblo", señaló.