La Conferencia Episcopal Española (CEE) calificó de “doloroso e injusto” el fenómeno de la “telebasura” y señaló que ésta no se puede justificar ni por el “refrendo de las audiencias numerosas” ni por el recurso a una malentendida libertad de expresión.
La Comisión Episcopal de Medios de Comunicación Social denunció que muchas veces una “exclusiva visión mercantilista de la comunicación” conduce a unos contenidos de “bajo perfil ético y cultural” que constituyen “un atentado continuado a la salud moral y cultural de sus usuarios”.
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En un mensaje con motivo de la Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales, que se celebrará el 23 de mayo, la Comisión Episcopal calificó de injusta a esta “patología televisiva” cuando “se ensaña en la ridiculización de la concepción auténtica de la familia y de los sentimientos religiosos de los católicos y hasta en el ataque abierto o solapado”.
"Cuando la libertad de expresión no se usa con justicia, se vuelve en contra del adecuado ejercicio del derecho de la información, al no armonizarse éste con el respeto debido al resto de los derechos fundamentales de la persona”, señaló el comunicado.
"Para excusar esta patología televisiva –señalaron los obispos- tampoco se puede apelar al refrendo de las audiencias numerosas a las que previamente se les induce machaconamente al consumo de dichos productos audiovisuales y no se les da, en la práctica y al alcance de los bolsillos de la gente humilde, otras alternativas, debido a la homogeneización mimética de este tipo de programas en las mismas bandas horarias en las parrillas de casi todas las cadenas".
Ante tal situación, la Comisión pidió responsabilidad en el uso de los medios y mejor formación a todos los actores sociales mediante un sano y maduro sentido crítico que, para los católicos, ha de estar guiado por la doctrina de la Iglesia.
Asimismo, la Comisión de la CEE reiteró su propuesta del año 2001 de crear, como en la mayor parte de los países europeos, un Consejo Audiovisual de gran representatividad social que colabore con la Administración en su obligación de “preservar unos mínimos de calidad ética y estética en los medios, sobre todo en el televisivo”.
Los Obispos opinaron que la anunciada reforma de la Televisión Pública por parte del nuevo Gobierno podría ser la ocasión para abordar la creación de este Consejo "tantas veces demandado".