El alcalde de Castellón, José Luis Gimeno, salió en defensa del Obispo de la diócesis Segorbe-Castellón, Mons. Juan Antonio Reig Plá, y acusó a los concejales socialistas y nacionalistas de ser los causantes de la polémica suscitada por la homilía del Prelado el domingo pasado.
A través de un comunicado firmado por él mismo, el alcalde señaló que el Obispo "habló donde tenía derecho a hablar y defendió libremente lo que consideró necesario defender según sus ideas y las directrices de la Conferencia Episcopal. Otra cosa es que algunos concejales de la oposición estuvieran en la misa sólo por la foto".
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Gimeno manifestó sentirse "desagradablemente sorprendido al ver cómo los dirigentes locales de partidos políticos que se consideran así mismos defensores de las libertades le niegan al señor obispo de Segorbe-Castellón la libertad de opinar sobre asuntos como el de la enseñanza de Religión".
La primera autoridad municipal calificó de "absurda y lamentable" la propuesta del concejal Juli Domingo (PSOE) sobre la conveniencia de haber expulsado al Obispo de la basílica el pasado domingo y dejó bien claro que no piensa pedirle a Mons. Reig Plá que se disculpe.
"No entiendo que el PSOE y el Bloc pretendan que yo, como alcalde, exija al obispo pida perdón por haber defendido en una iglesia, es decir en un edificio dedicado al culto religioso y en un acto del mismo carácter, los criterios de la jerarquía católica", prosiguió el alcalde tras sugerir que alguien ha perdido el sentido común "y no es el obispo".
Por último, Gimeno aseguró que aunque discrepara de las ideas de Mons. Reig Plá respecto a la enseñanza de Religión, "que no discrepo, defendería siempre su derecho a la libertad de expresión como tenemos todos los ciudadanos". Los castellonenses "merecen otra clase de debates políticos", afirmó el alcalde e instó a los representantes de la oposición en el Ayuntamiento "a concluir esta situación".