El Papa Francisco alentó a acudir siempre a la Virgen María "con confianza, especialmente en los momentos de cansancio y de dificultad" seguros que Ella presentará a su Hijo Jesús las necesidades de cada uno.
Así lo dijo el Santo Padre durante la audiencia concedida este 11 de junio a un grupo de militares italianos acompañados por sus familiares.
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"Los encomiendo a la protección maternal de la Virgen: pueden dirigirse siempre a Ella con confianza, sobre todo en los momentos de cansancio y dificultad, seguros de que, como Madre tiernísima, sabrá presentar a su Hijo Jesús las necesidades y las expectativas de cada uno".
En esta línea, el Papa explicó que la Virgen María "es una madre, y como todas las madres sabe cómo vigilar, cómo cubrir, cómo ayudar, cómo estar cerca".
En su discurso pronunciado en el Aula Pablo VI del Vaticano el Papa agradeció el servicio que estos militares sardos realizan en servicio a favor de las "calles seguras" en Roma para que la capital italiana "más segura, más protegida, más vivible".
Además, el Pontífice reconoció el "servicio discreto e importante que ofrecen a la Santa Sede" junto a la policía para proteger el orden público también en los alrededores de la Ciudad del Vaticano ante peregrinos y turistas de diferentes partes del mundo.
"Es una actividad que requiere disponibilidad, paciencia, espíritu de sacrificio y sentido del deber. Soy consciente de que este tipo de trabajo puede ser a veces un poco agotador -pienso en el verano, pienso en el frío del invierno-, pero es muy útil para la comunidad, que les agradece y los aprecia", dijo el Papa.
Por ello, el Santo Padre los animó a "ayudar a la gente a ser buenos ciudadanos", a cumplir su misión con profesionalidad y responsabilidad y recordar que "toda persona es amada por Dios, es su creatura y como tal merece respeto".
"Que la gracia del Señor alimente día a día el espíritu con el que se dedican a su trabajo, motivándolos a vivirlo con mayor cuidado y dedicación", concluyó el Papa.