La Conferencia Episcopal de El Salvador (CEDES) envió muestras de solidaridad y sus oraciones a los obispos, sacerdotes, religiosos, religiosas y laicos de Nicaragua, frente a la persecución perpetrada en las últimas semanas por el régimen dictatorial de Daniel Ortega.
"Elevamos hoy la voz para manifestar nuestra solidaridad. Nos preocupa sobre todo la seguridad de los pastores, Mons. Rolando José Álvarez, Obispo de la Diócesis de Matagalpa y Administrador Apostólico de Ia Diócesis de Estelí y del P. Harving Padilla, Párroco de San Juan Bautista, en la ciudad de Masaya", indicó CEDES en un comunicado del 5 de junio.
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Hace dos semanas, el canal de televisión de la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN) fue cerrado por orden del Gobierno; además, Mons. Álvarez y el P. Padilla experimentaron persecución y acoso policial.
En su mensaje, los obispos de El Salvador lamentaron "la situación social y política" y aseguraron que comparten "el dolor de ese pueblo noble, trabajador y tan sufrido".
Ese pueblo "que aspira vehementemente a vivir en un clima de respeto pleno de sus derechos fundamentales para alcanzar una vida digna en consonancia con el reino de vida que Cristo vino a traer y que es incompatible con cualquier tipo de situación inhumana", continuaron.
El mensaje resaltó que la Iglesia en El Salvador se ha unido en oración "con Ia Iglesia en Nicaragua, pidiendo a Dios por la paz, Ia comprensión, la tolerancia y el diálogo".
"Invocamos al Espíritu Santo en la solemnidad de Pentecostés para que la unidad y la armonía sean pronto una realidad en ese querido país, pues solo el Espíritu, como nos dice el Papa Francisco, reúne a los distantes, une a los alejados, trae de vuelta a los dispersos", añaden los obispos salvadoreños.
Finalmente, pidieron a Dios "por intercesión de la Inmaculada Virgen María y de San Óscar Romero, proteja y bendiga a todos los nicaragüenses, concediéndoles mediante el diálogo y la colaboración de todos, la tan anhelada paz social en Nicaragua".