Los obispos de Estados Unidos elevaron sus oraciones por las víctimas del tiroteo ocurrido este sábado en un supermercado de Buffalo, estado de Nueva York, en el que murieron 10 personas y otras tres resultaron heridas.
"Por favor únanse a nosotros en oración por las víctimas y todos los impactados por el tiroteo masivo ocurrido en un supermercado de Buffalo hoy", escribieron los obispos estadounidenses en su cuenta de Twitter.
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"También pedimos la intercesión de nuestra Madre bendita mientras rezamos para que nuestra sociedad recupera el respeto por toda vida humana, el fin de la violencia y el derramamiento de sangre", resaltaron los prelados.
Según informa CNN en Español, la policía ya ha detenido al sospechoso del ataque, un joven blanco de 18 años que estaba fuertemente armado, transmitía el tiroteo en vivo con una cámara en su cabeza y que disparó dentro y fuera del supermercado.
El comisionado de policía de Buffalo, Joseph Gramaglia, dijo en rueda de prensa que "alrededor de las 2:30 de hoy, un individuo que, según el alcalde, no es de esta área y se encontraba a horas de distancia, condujo hasta Buffalo y fue al mercado de Tops. Salió de su vehículo, estaba muy fuertemente armado. Tenía equipo táctico. Tenía puesto un casco táctico. Tenía una cámara que estaba transmitiendo en vivo lo que estaba haciendo".
En el estacionamiento le disparó a cuatro personas, tres de las cuales fallecieron. En total el sospechoso le disparó a 14 personas, 11 de las cuales eran negras.
El Obispo de Buffalo, Mons. Michael W. Fisher, lamentó que "en lo que lamentablemente se ha convertido en un hecho demasiado común en el país, ahora ha mostrado su rostro abominablemente malvado en Buffalo".
"En nombre de la Diócesis de Buffalo, en los términos más firmes, condeno este acto absolutamente sin sentido y rezo por todos los afectados y víctimas de este acto de cobardía", agregó el Prelado.
El Obispo instó al fin de la violencia con armas y pidió que "el buen Dios nos guíe" en el respeto a la vida y alentó a todos los católicos "y a todas las personas de fe a unirse en oración por las víctimas y por la paz".
El tiroteo sería un crimen de odio racial
Stephen Belongia, agente del FBI en Buffalo, dijo que el tiroteo será investigado como un "crimen de odio".
El sheriff del condado de Erie, John García, calificó el tiroteo como algo de "pura maldad".
García dijo que el ataque "fue un crimen de odio por motivos raciales directo de alguien fuera de nuestra comunidad, fuera de la ciudad de buenos vecinos como dijo el alcalde, que entró en nuestra comunidad y trató de infligirnos ese mal".
Autoridades del estado de Nueva York precisaron que el acusado enfrentará cargos de homicidio que podrían terminar en cadena perpetua sin opción a libertad condicional, un procedimiento que se iniciará esta misma noche.
"Nuestras oraciones están con las víctimas y las familias del tiroteo en Buffalo hoy. El odio racial y el asesinato no tienen lugar en la sociedad. Es pecaminoso y criminal", escribió en Twitter el Obispo de San Petersburgo, Mons. Gregory Parks.
ACTUALIZACIÓN: A las 20:51 (GMT-5) se agregó la declaración del Obispo de Buffalo