Un anciano sacerdote franciscano falleció tras caer accidentalmente de un tragaluz de la iglesia San Francisco de Asís en Tijuana, al norte de México.
Fray Fernando García Ramírez, de 84 años, falleció el 1 de mayo al caer del tragaluz, a una altura de aproximadamente cinco metros, mientras veía pasar una caravana de vehículos cerca del templo.
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La Arquidiócesis de Tijuana expresó en un comunicado la oración de la Iglesia "a nuestro Padre del Cielo" para "que tenga misericordia de él y que pronto goce de la Patria Celestial".
"Que la intercesión de nuestro Padre, San Francisco, nos lleve a vivir este momento que si bien nos embarga el dolor humano, nos invita a confiar en Jesús Resucitado. Que el alma de nuestro hermano Fray Fernando García Ramírez, por la grande misericordia de Dios, descanse en paz. Así sea", añadió.
El Arzobispo de Tijuana, Mons. Francisco Moreno Barrón, presidió la tarde del 3 de mayo la Misa Exequial de Fray Fernando en el templo de San Francisco de Asís.
En declaraciones al periódico Frontera, Fray Juan Carlos Salinas, sacerdote a cargo del templo San Francisco de Asís, recordó que el fallecido Fray Fernando era "una persona muy alegre", que "siempre estaba al pendiente de nosotros como sus hermanos, cuidándonos".
Además de bromista, lo recordó como "muy sencillo" y "muy sobrio en su manera de vivir, muy sobrio en su manera de dirigirse también a las personas".
También señaló que el fallecido sacerdote era "muy inteligente" y que les alentaba todo el tiempo a aprender latín, una lengua que "le fascinaba".