El Arzobispo de La Plata, Mons. Héctor Aguer, denunció un proyecto de la Legislatura de Buenos Aires para promover la esterilización quirúrgica de hombres y mujeres especialmente entre la población más pobre.
En su reflexión semanal en el programa televisivo “Claves para un Mundo Mejor”, el Arzobispo denunció que la esterilización quirúrgica, es “una mutilación moralmente grave”, suprime la capacidad reproductiva y precisó que el cuestionado proyecto argumenta se fundamenta en la “justicia social y, concretamente, al fenómeno de la pobreza que afecta sobre todo a las mujeres o la llamada feminización de la pobreza. Esto nos esta indicando que esta ley seria aplicada especialmente a los pobres”
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Tras señalar que “con ciudadanía sexual se quiere expresar la necesidad de la libertad de decidir sobre el propio cuerpo”, el Arzobispo sostuvo “se trata de los mismos argumentos o fundamentos que se usan en los proyectos que intentan legitimar el aborto. Lo que ocurre es que aquí se juega una concepción de la persona humana”.
Según Mons. Aguer, aunque el proyecto requiera el consentimiento informado, por escrito, “todos sabemos muy bien que en determinados ambientes y sobre todos en los ambientes de marginación y pobreza extrema que fácil es obtener este consentimiento por las propagandas, por las presiones, o comprándolos de alguna manera si se quiere imponer la costumbre de la esterilización”.
En este sentido, señaló que “hay mucha gente que se las ingeniará de modo rápido para obtener ese consentimiento de la gente y esto me hace pensar a los regímenes totalitarios en los cuales se ha aplicado en modo masivo la esterilización”.
“Ocurrió en China, en la India, en el Perú hace algunos años y responde a designios de las organizaciones internacionales vinculadas a las Naciones Unidas y de los grandes centros financieros del mundo que tienen el propósito de que no crezca la población en los países pobres”, recordó.
El Arzobispo enfatizó que para los legisladores bonaerenses podrá tratarse “de un método anticonceptivo pero lo cierto es que tendrá un efecto demográfico o antidemografico. Lo que necesita nuestro pueblo, especialmente nuestra gente sencilla, es una buena política familiar, es el apoyo a las familias para que puedan salir de la pobreza, de la miseria para que tengan trabajo, para que los hijos puedan ser educados y criados dignamente”.
“Este es un proyecto con un poder destructivo realmente muy grave y tengo la esperanza de que esto no prospere, pero es necesario decirlo, es necesario comentarlo para que estemos todos alerta”, advirtió.