El embajador de Ucrania ante la Santa Sede, Andrii Yurash, comunicó a través de su perfil de Twitter que un soldado ucraniano ha escrito una carta al Papa Francisco para pedirle "salvar a la población exhausta" de la ciudad de Mariupol.

Se trata del comandante de la 36º brigada de infantes de Marina ucraniana, Sergiy Volyna, que se encuentra defendiendo la ciudad de Mariupol ante los ataques rusos, uno de los lugares más devastados por la guerra.  

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Según explicó la agencia Efe, el soldado se dirigió al Papa Francisco "en busca de ayuda" y aseguró en la misiva que "solo las oraciones no son suficientes". 

"No soy católico, soy ortodoxo. Creo en Dios y sé que la luz siempre vence la oscuridad. He luchado durante más de 50 días en un asedio completo, y todo para lo que tengo tiempo es para una batalla feroz por cada metro de la ciudad sitiada", explicó el soldado en su carta.  

"Probablemente ha visto muchas cosas en su vida, pero estoy seguro de que nunca ha visto lo que está pasando en Mariupol, porque eso es el infierno en la tierra", dijo el soldado a continuación.

El soldado ucraniano también explicó al Papa "los horrores" que veía cada día, como "las mujeres con niños y bebés que viven en búnkeres bajo el objetivo de los aviones enemigos" o como "los heridos mueren todos los días porque no hay medicinas, agua o comida". 

Según señaló el embajador en su red social, el soldado terminó la carta pidiendo al Santo Padre salvar las vidas de los ucranianos "de las manos satánicas". 

 

El pasado 13 de marzo, tras finalizar el rezo del Ángelus, el Papa lamentó la situación de las víctimas de la guerra en Ucrania y exigió el cese del conflicto antes de que las ciudades "se conviertan en un cementerio".  

El Papa Francisco expresó su profundo dolor por la situación que se está viviendo en Ucrania y citó expresamente a Mariupol, la ciudad ucraniana conocida como "la ciudad de María", que se ha convertido en el lugar que más severamente está sufriendo los ataques de Rusia.   

Por su parte, el Arzobispo Mayor de la Iglesia Greco Católica Ucraniana, Su Beatitud Sviatoslav Shevchuk, acusó a las fuerzas rusas de cometer un "genocidio" en esta ciudad. 

En un video mensaje emitido el 21 de marzo, el Arzobispo lamentó que "la gente está muriendo no solo por las armas enemigas, sino también por el odio. Cientos de personas mueren de hambre, no solo en la ciudad sino también en sus alrededores". 

Esta ciudad contaba con una población de más de 400 mil habitantes antes de la guerra, y ahora yace en ruinas tras el bombardeo ruso.

Entre los objetivos atacados por los rusos están una clínica de maternidad, una escuela de arte que albergaba a cientos de residentes y un teatro donde cientos de personas habían buscado refugio.

El presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskyy, calificó el asalto a Mariupol como "un terror que será recordado en los siglos venideros".