El lunes 11 de abril, cientos de católicos participaron en el tradicional Vía Crucis acuático, una expresión de la fe local que se lleva a cabo desde hace 41 años en parte del Gran Lago de Nicaragua o Cocibolca, y que invita a meditar la pasión y muerte de Jesucristo.
Según medios locales, el Vía Crucis acuático fue organizado por la Diócesis de Granada y el recorrido se realizó frente al puerto del municipio de San Carlos, departamento de Río San Juan, cerca de la costa de Granada (Nicaragua).
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Durante el Vía Crucis, pequeñas embarcaciones siguieron la lancha principal, que llevó una estatua de Cristo con la cruz a cuestas, en dirección a cada una de las 14 estaciones representadas en 14 isletas de las más de 360 que existen en el Gran Lago de Nicaragua, informaron los medios.
Según un comunicado de la Fuerza Naval de Nicaragua, "participaron 15 embarcaciones con 350 personas a bordo", se contó con la seguridad correspondiente y se respetaron las medidas de bioseguridad para prevenir contagios de COVID-19.
En un video se observa a un sacerdote dirigir el rezo de las estaciones del Vía Crucis durante el trayecto. Al finalizar el rezo en cada isleta, adornadas con flores y frutas, la lancha que transportó la imagen de Jesucristo fue cargada con las ofrendas, señalaron los medios locales.
Sonia Lugo, una feligresa que asistió al Vía Crucis acuático y que esperó a las embarcaciones en la isleta de la séptima estación, dijo a la agencia EFE que para ella "el Vía Crucis es el recordar a Jesús derramando su última sangre por mi salvación y tu salvación".
El Vía Crucis acuático suele realizarse de lunes a viernes de cada Semana Santa, con los años, esta tradición de la fe popular se ha convertido en un atractivo turístico único en Nicaragua.
Si bien en 2021 la pandemia del COVID-19 impidió realizar en Nicaragua procesiones y celebraciones públicas de la fe católica durante la Semana Santa, el Vía Crucis acuático fue una de las pocas celebraciones que sí se llevó adelante.
En esa ocasión, la actividad fue organizada por la Alcaldía de Granada y no contó con la participación de la Iglesia Católica. Durante la procesión, niños y adolescentes representaron las escenas de la pasión de Jesús que componen la Pasión y Muerte de Cristo.