El Papa Francisco recibió este sábado 9 de abril al prefecto de la Congregación de las Causas de los Santos, el Cardenal Marcello Semeraro, y autorizó la promulgación de nuevos decretos que reconocen un milagro, dos martirios y el reconocimiento de las virtudes heroicas de siete nuevos Venerables, entre ellos dos obispos misioneros y tres mujeres laicas.

Según informó la Oficina de Prensa de la Santa Sede, el Papa Francisco ha autorizado a la Congregación para las Causas de los Santos promulgar el decreto que reconoce el milagro atribuido a la intercesión del beato Artemide Zatti, laico profesor de la Sociedad de San Francisco de Sales (1880-1951). Médico y misionero en la Patagonia, que fue beatificado por Juan Pablo II en 2002. 

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El milagro consistió en la recuperación de un hombre filipino de Tanauan Batangas, que se estaba muriendo debido a un grave ictus isquémico en la cabeza, agravado por una fuerte hemorragia.

Su familia no tenía medios para operarle y le llevó a casa. Tres días más tarde, el enfermo se quitó de pronto la sonda nasogástrica con la que se alimentaba y el oxígeno y pidió que le dejaran comer. Su hermano, coadjutor salesiano en Roma, había pedido por su recuperación, y el mismo día que fue ingresado en el hospital, comenzó a rezar por la intercesión del beato Artemide Zatti.

Al mismo tiempo, el Papa reconoció el martirio de los Siervos de Dios Giuseppe Bernardi y Mario Ghibaudo, sacerdotes diocesanos, asesinados por odio a la fe el 19 de septiembre de 1943 por los nazis.

También permitió reconocimiento de las virtudes heroicas del Siervo de Dios Martino Fulgenzio Elorza Legaristi, de la Congregación de la Pasión de Jesucristo y primer Obispo de la Prelatura de Moyobamba (1899-1966); del Siervo de Dios Francesco Costantino Mazzieri, de la Orden de los Hermanos Menores Conventuales, Obispo de Ndola (1889-1983). 

Además, las virtudes heroicas de la Sierva de Dios Lucía Noiret, fundadora de la Congregación de las Siervas del Sagrado Corazón de Jesús bajo la protección de San José (1832-1899); de la Sierva de Dios Casimira Gruszczyńska, fundadora de la Congregación de las Hermanas Franciscanas de los Afligidos (1848-1927); de la Sierva de Dios Aurora Calvo Hernández-Agero, fiel laica (1901-1933); de la Sierva de Dios Rosalía Celak, fiel laica (1901-1944) y de la Sierva de Dios María Aristea Ceccarelli, fiel laica (1883-1971).