Un sagrario de oro con el Santísimo Sacramento en su interior, además de otras pertenencias, fue robado de una iglesia católica en Hydes, Maryland (Estados Unidos), entre la noche del viernes 25 de marzo y la mañana del día siguiente.
"Me entristece que se hayan llevado el sagrario con la Sagrada Eucaristía, lo cual es espantoso", dijo el miércoles 30 de marzo a CNA –agencia en inglés del Grupo ACI– el P. Pete Literal, párroco de la iglesia San Juan Evangelista (St. John the Evangelist Catholic Church), ubicada en el condado de Baltimore.
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Además del sagrario con la Eucaristía, fueron sustraídos la base de una cruz procesional, cuatro candelabros y seis portavelas. Según el informe policial, también hubo daños en una puerta lateral de la iglesia, "donde faltaba una pieza de dos pulgadas [cinco centímetros] cerca de la manija".
Según el informe, el daño de la puerta "no estaba cerca del pestillo o la cerradura y no hubo daños graves por hacer palanca en las superficies adyacentes".
El gerente comercial de la iglesia, Shawn Blair, dijo a CNA el miércoles que la parroquia todavía está trabajando para determinar los daños y pérdidas, pero dijo que el valor sería de más de 20 mil dólares "sin duda".
El P. Literal comentó que no está claro cómo el ladrón o ladrones ingresaron y salieron de la iglesia, ya que no hay cámaras. El vicario parroquial, P. Ross Conklin, se estaba preparando para la Misa el sábado por la mañana cuando descubrió que los artículos habían sido robados.
"Es muy doloroso que alguien le haga eso a una iglesia. El hecho de que se hayan llevado la Eucaristía es muy molesto", dijo Blair.
El P. Literal ha pedido a los responsables que devuelvan los artículos "y que por favor cuiden la Eucaristía en el sagrario", porque "es sagrada". Los feligreses están entristecidos y apenados por la noticia, añadió.
El sábado por la tarde, dijo el P. Literal, "hicimos una oración sencilla de consagración de la iglesia" y rociamos agua bendita. El próximo fin de semana planea hacer una Misa de reparación. Por el momento, se ha colocado un sagrario provisional.
"Esto no es un crimen de odio sino más bien de codicia. La gente está robando cosas sin preocuparse de nada; en realidad es solo codicia y dinero", dijo el sacerdote.
El informe del incidente incluye los delitos de robo en segundo grado y destrucción de la propiedad.
Scott Shellenberger, el fiscal de distrito de Maryland, le dijo a CNA que la pena máxima por robo en segundo grado es de 15 años de prisión. Por destrucción maliciosa, daños menores a mil dólares pueden recibir 60 días de prisión; los daños de más de esa cantidad se sancionan hasta con tres años de prisión, dijo.
Quienes tengan información que ayude a resolver este caso, pueden escribir a iwatch@baltimorecountymd.gov.
También se puede enviar información a la policía del condado de Baltimore utilizando este formulario, o enviar datos de forma anónima utilizando el sitio web Metro Crime Stoppers of Maryland.
Traducido y adaptado por Diego López Marina. Publicado originalmente en CNA.
