Exactamente un mes después del inicio de la guerra, los obispos ucranianos ponen toda su esperanza en la consagración de Rusia y Ucrania al Corazón Inmaculado de María por parte del Papa Francisco, acto que tendrá lugar mañana, 25 de marzo, en la Solemnidad de la Anunciación del Señor.
En declaraciones a la fundación pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada en Italia (ACN), Mons. Stanislav Shyrokoradiuk, Obispo de Odessa, aseguró que los prelados de Ucrania, "llenos de esperanza, rezamos con todo el mundo y pedimos oraciones. Creemos en la ayuda de María, Madre de Dios".
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Según informó la fundación pontificia en una nota de prensa, a pesar de los duros combates, las comunidades católicas de Odessa y otras regiones del país se preparan para el acto de consagración mediante novenas y otras oraciones.
Desde Kharkiv, en el este de Ucrania, Mons. Pavlo Honczaruk compartió con ACN su alegría "por la iniciativa del Papa Francisco de consagrar Rusia y Ucrania al Inmaculado Corazón de María".
"En medio de tanto sufrimiento y destrucción, el acto de consagración es un signo de la victoria del amor, la bondad y la vida de Dios", resaltó.
"También nuestra diócesis, junto con otras de Ucrania, ha comenzado a preparar las novenas al Corazón Inmaculado de María y nos estamos organizando para este hermoso acontecimiento", aseguró Mons. Honczaruk, quien también invitó a la gente a "rezar el Rosario para pedir la intercesión de María".