En la mañana de este jueves 24 de marzo, el Papa Francisco ha recibido en audiencia en el Palacio Apostólico del Vaticano a los participantes en la Conferencia General de los Hermanos Maristas, a quienes animó a "permanecer fieles al servicio de la educación de los jóvenes".
El Santo Padre, que definió este evento como "muy importante", explicó ante los presentes que durante esta Cuaresma "la Madre Iglesia nos llama a poner las cosas en el orden correcto: Dios y su Palabra primero".
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"Es fácil decirlo -continuó el Papa-, pero no es fácil hacerlo. Sobre todo cuando la Palabra nos pide que 'miremos más allá', como dice el título de su conferencia", señaló.
"Más allá de la mentalidad mundana, más allá de los intereses a corto plazo, más allá de una perspectiva parcial, para abrirse al horizonte de una fraternidad universal. Pero siempre más allá", defendió el Papa.
A continuación, el Pontífice subrayó que la familia de los Hermanos Maristas es "multicultural y multiétnica", lo que requiere "superar las fronteras geográficas y de mentalidad", sin desprenderse de las raíces, ya que para el Papa "no hay contradicción entre la fidelidad a las raíces y la apertura universal".
El Papa quiso destacar también la misión de los Hermanos Maristas de "permanecer fieles al servicio de la educación de los jóvenes", siguiendo el carisma de su fundador, San Marcelino Champagnat.
Asimismo, el Papa resaltó que los jóvenes "están mostrando interés por la ecología" y aseguró que "aquí hay un gran campo para la educación", ya que los jóvenes y los niños "están predispuestos a convertirse en custodios de la creación".
"El ejemplo que puse sobre la ecología puede aplicarse a otros campos, como el del compromiso social y político, el de la comunicación, o incluso el del estudio y el trabajo, vistos desde la perspectiva de la promoción integral de la persona", explicó el Papa.
El Pontífice también señaló que "Jesucristo es el Maestro de la vida y de la verdad, el camino a seguir para llegar a ser hombres y mujeres en plenitud, y el Espíritu Santo es el Maestro interior que forma a Cristo en nosotros".
Por último, el Papa ensalzó la vocación de acompañar a los jóvenes en lo que definió como "una aventura" y puntualizó que la educación "es un reto para toda persona, para el pensamiento, los sentimientos y el trabajo de las personas".
"Que el Espíritu Santo os ilumine y conforte siempre en vuestro camino y en vuestro servicio. Y que mi bendición te acompañe también", concluyó el Papa Francisco.