Los católicos cubanos de la Diócesis de Ciego de Ávila participaron en la celebración del Miércoles de Ceniza, en el inicio de la Cuaresma, rezando por la paz en Ucrania y por todos los pueblos que sufren "la plaga de la guerra".
En la Misa que presidió el 2 de marzo en la Catedral San Eugenio de la Palma, el Obispo de Ciego de Ávila, Mons. Juan Gabriel Díaz Ruiz, recordó el llamado del Papa al ayuno y la oración por la paz en Ucrania.
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
En su homilía, el Prelado cubano alentó a rezar al Señor "para que la guerra, la violencia, el odio y el resentimiento no prevalezcan".
Al contrario, animó el Obispo, que "el perdón, la misericordia, la compasión, la tolerancia sean lo prioritario en el mundo entero, especialmente en los pueblos que sufren la plaga de la guerra".
La oficina de Comunicaciones de la Diócesis de Ciego de Ávila informó que durante la celebración se colocó en el presbiterio una bandera de Ucrania con palomas blancas bordadas, como símbolo de paz.
Sobre esta se colocó una vela que se mantuvo encendida durante toda la Misa, como símbolo de solidaridad con el pueblo ucraniano.
En su homilía, Mons. Díaz recordó que la Cuaresma es "un tiempo de peregrinación, de camino, de purificación de nuestra conciencia de todo lo que nos aparta de Dios".
"Son 40 días en los que la oración, el ayuno, la meditación y la Palabra de Dios nos ayudan a prepararnos para el encuentro del Señor", resaltó.