El Primado de la Iglesia Greco-Católica Ucraniana, el Patriarca Sviatoslav Shevchuk, grabó un video mensaje en Kiev en este Miércoles de Ceniza, en el que alentó a rezar y ayunar todos juntos esta Cuaresma para vencer "al diablo, espíritu de guerra y muerte".
En el mensaje, el Patriarca recordó que "hoy estamos viviendo el séptimo día de esta guerra. En este día, 2 de marzo de 2022, a la llamada de Su Santidad el Papa Francisco, todo el mundo se une en oración y ayuno por la paz en Ucrania".
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"En el día de hoy rezamos y ayunamos juntos. Ayunar significa destruir todo aquello que nos divide, todo aquello que nos impide compartir nuestra vida con la de los demás. Por eso este ayuno es tan importante hoy, para expulsar al que nos divide: al diablo, el espíritu de guerra, el espíritu de muerte", explicó el Arzobispo.
El 24 de febrero Rusia inició el ataque contra Ucrania en distintas ciudades. El Patriarca decidió quedarse con sus fieles en la capital Kiev para acompañarlos con su oración y con ayuda concreta, como la enviada por la fundación pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN).
"Hay que unirse en oración y unirse en nombre de la paz, para que la vida que vivimos se imponga a la muerte. Un ejemplo de esta unidad interior en la oración son las palabras de Cristo al Padre: '¡Oh Dios, oh Padre, todo lo mío es tuyo, todo lo tuyo es mío!'", dijo el Patriarca.
"Uniéndonos en la oración, uniéndonos en nuestra vida interior y espiritual, nos reconocemos como hijos e hijas de la única Iglesia de Cristo, Iglesia que es el Cuerpo de Cristo, de la cual Él mismo es la cabeza".
El Patriarca dijo además que "hoy es un día especial para todos nosotros porque sentimos que no estamos solos en nuestra angustia. Sin embargo, la guerra continúa. Esta noche nuestro Zhytomyr fue bombardeado. Siguen bombardeando nuestras ciudades y pueblos".
"Nos preocupan especialmente Kharkiy, Sumy, Chernihiv, Kherson, y otras ciudades ucranianas que fueron asediadas. En esos lugares ya hay gran escasez de alimentos y medicinas", continuó.
"Ya hoy tenemos que trabajar para salvar a la población local. Privándonos de alimentos nos solidarizamos con ellos", subrayó el Arzobispo.
El Patriarca explicó que unirse en oración significa "fundir nuestras vidas en una sola. Significa compartir mi propia fuerza vital con el prójimo y luego fortalecerme yo mismo a través de la fuerza vital que recibo de aquel que está unido a mí en la oración".
"Oh Dios, acepta nuestro ayuno y nuestra oración. Oh Dios, únenos a todos, que la vida venza a la muerte, que la oración común del mundo entero traiga la paz a Ucrania", concluyó.