La fundación pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada en Italia (ACS por sus siglas en italiano) se dirigió a los católicos italianos para mostrar la realidad de los cristianos del Cáucaso, que sufren la persecución de una guerra ya olvidada.
Debido a la creciente tensión entre Rusia y Ucrania, la persecución a la comunidad cristiana de Armenia ha sido silenciada y retirada del panorama internacional. Ante esta situación, Ayuda a la Iglesia Necesitada pide que Occidente dirija también su mirada hacia los cristianos del Cáucaso y para ello propone dos proyectos de ayuda.
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La realidad de la guerra
A través de un comunicado, ACS explicó que esta iniciativa deriva de la necesidad de ayudar a los refugiados de Nagorno-Karabaj, una pequeña región montañosa del Cáucaso habitada principalmente por armenios, que se ha convertido en un enclave en disputa y escenario del último enfrentamiento armado iniciado en septiembre de 2020 entre Armenia (94,4% cristiana) y Azerbaiyán (96,2% musulmana).
Según la fundación pontificia, el triste legado de la desaparecida URSS se fue superponiendo a los intereses de las tres potencias regionales: Rusia, Turquía e Irán. Durante el transcurso del conflicto, los lugares del patrimonio cultural y religioso se convirtieron en objetivos principales. Como por ejemplo la Catedral de Shusha, un importante monumento histórico y religioso que fue alcanzado en dos ocasiones por fuego de artillería.
Un alto al fuego insuficiente
El alto al fuego negociado en noviembre de 2020 no fue suficiente para evitar innumerables crímenes de guerra, donde más de cuatro mil soldados armenios murieron y solo 25 mil de unos 90 mil refugiados regresaron a sus hogares.
Muchos armenios se sienten defraudados y desesperanzados ante la permanencia de las tropas rusas en Nagorno-Karabaj durante un periodo de cinco años para garantizar la paz.
Una ayuda urgente en la ciudad de Goris
La intervención de Ayuda a la Iglesia Necesitada es cada vez más urgente, ya que las ayudas estatales ya no existen y muchas organizaciones caritativas abandonaron el territorio. Por estas razones, ACS (la oficina en Italia de Ayuda a la Iglesia Necesitada), hace un llamamiento a toda la comunidad católica italiana para recaudar los fondos necesarios para ayudar a los refugiados cristianos de Goris.
La ciudad de Goris está situada cerca de las fronteras de Nagorno-Karabaj y es aquí donde ACS quiere ayudar a 150 familias cristianas durante 15 meses, en primer lugar proporcionándoles alimentos y alojamiento, y en segundo lugar facilitando la adecuación de la oferta y la demanda de trabajo para que las familias sean autosuficientes en el menor tiempo posible.
De este modo, ACS contribuirá a las actividades de la Iglesia armenia, que compensa la falta de ayuda de las autoridades civiles asegurando que miles de refugiados cristianos reciban no sólo asistencia espiritual y psicológica, sino también apoyo material.
Apoyo a seminaristas
Fiel a su misión como fundación pontificia dedicada, en particular, a fomentar la atención pastoral allí donde se ve obstaculizada, ACS en Armenia también quiere apoyar la formación de los seminaristas. El proyecto propuesto a la comunidad italiana se llevará a cabo de acuerdo con el Ordinariato de la Iglesia Católica Armenia.
Como recuerda el director de ACS Italia, Alessandro Monteduro, "el Papa Francisco, durante su viaje apostólico a Armenia, afirmó que hoy los cristianos en algunos lugares son discriminados y perseguidos por el mero hecho de profesar su fe. En esa ocasión, el Pontífice añadió que el pueblo armenio se encuentra entre los que han experimentado el sufrimiento, el dolor y la persecución. Es a este pueblo al que los futuros sacerdotes, con el apoyo de los benefactores de ACS, tendrán que servir", concluyó.
