Este sábado 12 de febrero, cuando se celebra en Venezuela el Día Nacional de la Juventud, el presidente de la Comisión Episcopal de Adolescencia y Juventud, Mons. José Manuel Romero, envió un mensaje en el que dice a los jóvenes que son valientes, sembradores de esperanza y protagonistas de la revolución de la caridad y el amor.
En el texto titulado "Joven venezolano, ¡Eres valiente y creativo!", el también Obispo de El Tigre recuerda que "los jóvenes se caracterizan por su capacidad de extender su visión en el horizonte. No le ponen límites".
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El Prelado resalta luego que los jóvenes lo "tienen bien claro: quien vive solamente según el principio del beneficio propio o busca la realización personal sin tener en cuenta a los demás, no encontrará la verdadera felicidad".
"Aquí podemos percibir, palpar la valentía y la creatividad del joven venezolano, porque están empeñados en el servicio a los demás", prosigue el Obispo, que luego cita el documento Christus vivit del Papa Francisco, que en el numeral 166 afirma que "cada edad tiene su hermosura, y a la juventud no pueden faltarle la utopía comunitaria, la capacidad de soñar unidos, los grandes horizontes que miramos juntos".
Mons. Romero indica luego que "en plena tempestad del Covid-19, cuando algunos buscaron su beneficio personal, brillaron, y siguen brillando, compañeros de viaje que han mostrado que hay héroes de 'a pie'. Personal sanitario, obreros de los hospitales, conductores, presbíteros, monjas, quienes, sin duda, en su juventud escucharon que la vida se fortalece dándola".
El Obispo destaca asimismo que genera esperanza, en medio de la grave crisis social, política y económica que vive el país desde hace años, ver a los jóvenes sirviendo, algo que hacen "no por protagonismos personales, sino porque la creatividad del Espíritu les impulsa. Y el Espíritu hace nuevas todas las cosas".
"Gracias por atreverse a soñar en grande, por sus esfuerzos diarios en lo común de cada día, por ser resilientes, y usar la creatividad que recibieron como don de Dios Padre para proyectos innovadores que les permite ayudar a otros y sustentarse. ¡No se detengan! ¡lo están haciendo bien!".
A ejemplo de Jesús, afirma el Prelado, los jóvenes de Venezuela deben seguir haciendo "el bien. Es la manera de romper este espiral de corrupción, de violencia, de violación de los derechos humanos".
"Ustedes siguen siendo sembradores de esperanza. No dejen que nadie les arrebate ese entusiasmo en la construcción de la Civilización del Amor".
Finalmente el Prelado hizo votos para "que el Señor Jesús, eternamente joven, siga manteniéndoles firmes en la fe, alegres en la esperanza y diligentes en el amor".