El presidente de la ONG Más Vida, Raúl Magnasco, condenó la política de entrega masiva de la "píldora del día después" en Buenos Aires (Argentina), y la calificó como una banalización de la vida, pues se trata de un fármaco cuyo uno de sus efectos es abortivo.
El boletín Notivida informó ayer 10 de febrero que el responsable de la Coordinación de Salud Sexual, Sida y Enfermedades de transmisión sexual (ITS) del Ministerio de Salud de la Ciudad de Buenos Aires, Fabián Portnoy, dijo que la Anticoncepción Hormonal de Emergencia (AHE) "se utiliza poco" y que "hay mucho mito y prejuicio en torno a su uso".
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Notivida indicó que "el área a cargo de Fabián Portnoy, lanzó esta estrategia en agosto del año pasado y ahora evalúan los primeros impactos mensurables".
El objetivo del área dirigida por Portnoy es "facilitar el acceso e incrementar" el uso de la AHE. El funcionario dijo que para ello se la incluyó en la "Red de Distribución de Preservativos", para entregarla en hospitales, centros de salud y organizaciones de la sociedad civil.
"El preservativo tiene una tasa de fallo, por lo que cualquier persona de prácticas heterosexuales debería tener AHE en su casa" en lugar de esperar a que ocurra un "accidente" para ir a buscarla, se argumentó en agosto de 2021.
"Se puede entregar de modo preventivo para que no tenga que salir corriendo a buscarla", afirmó Portnoy, quien añadió que las niñas de 13 años pueden recibir esta pastilla "de forma autónoma", es decir sin el acompañamiento de un adulto.
También dijo que "se puede tomar tantas veces como se necesite, incluso más de una vez al mes", sin necesidad de receta médica.
La AHE se distribuye en centros de salud, incluso en organizaciones comunitarias y barriales.
Al respecto Rául Magnasco, presidente de la ONG Más Vida dedicada al apoyo de la mujer durante su embarazo, denunció que "una vez los gobernantes argentinos, lejos de procurar disminuir los efectos de la dura pobreza que azota a la población, parecen estar más preocupados por reducirla a fuerza de eliminar pobres, preferentemente antes de que lleguen a nacer".
Con la "pastilla del día después" o "abortivo de emergencia" "intentan masificar en una pretendida nueva banalización de la misma, de sus efectos y del hecho que es inconstitucional, por atentar contra el primer derecho humano, la vida".
Magnasco dijo que recurren al clásico eufemismo de llamarla "Anticoncepción Hormonal de Emergencia" (AHE) "que nada dice de sus terribles efectos adversos y del daño que produce en la mujer o en el niño en gestación".
"Es un método abortivo, reconocido como tal en todo el mundo, que por medio de una sobredosis de levonogestrel modifica de tal forma las condiciones químicas del útero y hace imposible el anidamiento del embrión para continuar allí su gestación, produciendo el aborto inmediato, efecto que en los prospectos de otros países se denomina 'anti-implantatorio'", precisó.
"No obstante, la modificación y nuevo supuesto efecto 'anticonceptivo' tiene origen en su anterior aprobación, en tiempos que el aborto se encontraba prohibido, logrando entonces una adaptación del mismo 'a la carta', que permitiera la comercialización local", agregó.
"Preocupa además la negativa de los gobernantes a reconocer los duros efectos adversos e intensos dolores que produce en la mujer, los que son simplemente omitidos, seguidos de una peligrosa recomendación de que se pueden ingerir todas las que se deseen, propiciando algo que es preocupación en otras naciones: la banalización y toma frecuente de lo que debería ser 'emergencia', pasando a ser un método más 'anticonceptivo'", alertó Magnasco.
Indicó que con esta medida "se deja en evidencia el verdadero objetivo poblacional: los pobres, puesto que recurren a su distribución en los estratos sociales más vulnerables, utilizando de forma infame a los voluntarios y referentes sociales, quienes se encuentran en contacto con los más humildes y en donde sin dudas, el Estado se encuentra ausente".
"Desde la Fundación Más Vida repudiamos y denunciamos esta maniobra para distribuir con nuestros impuestos píldoras abortivas entre los pobres, es eugenésico y criminal", concluyó el líder provida.