En su más reciente carta pastoral, la Conferencia del Episcopado Dominicano (CED) invitó a imitar a San José para contrarrestar lo que consideran las cuatro principales "pandemias espirituales" de nuestro tiempo: "la mentira, violencia, afán de dinero y hedonismo".
En su carta titulada "San José, custodio del Redentor y modelo del creyente", los obispos señalaron que "el verdadero drama de nuestro siglo es el vacío de Dios en el alma de tantos pueblos y la verdadera pandemia que nos aqueja es la anemia espiritual: el hombre de hoy 'se muere por falta de conocimiento de Dios'".
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"Ese vacío de Dios en el alma de tantos pueblos se hace palpable en por lo menos cuatro pandemias que le amenazan constantemente. Se trata de una lucha sin igual que se desarrolla en el corazón de las personas y de los pueblos. Estas pandemias son, entre otras: la mentira, la violencia, el afán de dinero y el hedonismo", explicaron en el documento publicado con motivo de la solemnidad de Nuestra Señora de la Altagracia.
También afirmaron con preocupación, que "nuestro país vive bajo la influencia de una sociedad neopagana, marcada por la cultura de la muerte, que tiene como objetivo la destrucción de la familia".
1. Pandemia de la mentira
En su mensaje los obispos realizan una analogía con la pandemia del COVID-19 y señalan que la pandemia de la mentira, a través de diferentes medios, "bombardea nuestros hogares presentando normas, costumbres y modelos de vida contrarios" a la Revelación.
Subrayaron que esta pandemia es "la más peligrosa", ya que "nuestros niños y jóvenes muchas veces son víctimas de agentes que difunden falsas doctrinas y una sabiduría enemiga de la Cruz de Cristo".
2. Pandemia de la violencia
Sobre este punto, el Episcopado indicó que el objetivo de esta pandemia "consiste en hacer que los hombres se maten unos a otros indiscriminadamente", la cual "lamentablemente parece que se ha ido adueñando de algunos pueblos".
Los obispos afirman que "necesitamos" personas de corazones pacíficos que protejan a "nuestras familias", como San José, ante las diversas manifestaciones de la pandemia de la violencia, como el "maltrato a la niñez, burlas y acosos entre alumnos (bullying), vandalismos, peleas callejeras, trata de personas, terrorismo, armamentismo", entre otras.
En ese sentido, explicaron que en una sociedad marcada por la violencia psicológica, verbal y física hacia la mujer, presentan a San José como "modelo de respeto hacia su esposa, la protegió, cuidó de ella y del hijo", y exhortan a "imitarle en sus virtudes de fe, confianza, amor, entrega, sacrificio, ternura y docilidad".
3. Pandemia de afán del dinero
Respecto a la pandemia de afán del dinero, los prelados explicaron que se trata principalmente de la "idolatría del dinero que se alza como alternativa al Dios único".
"Los ilusos piensan que quien más bienes consiga, más asegurada tiene la supervivencia en este mundo. La vida humana se convierte para ellos en un inmenso mercado donde cada uno intenta, compitiendo, atesorar el máximo de riquezas", resaltaron.
En ese contexto, los obispos invitaron al pueblo dominicano a mantener la unidad de la familia en las situaciones de precariedad, ya que la "respuesta no está en el dinero, sino en el Dios providente", por tanto "la unidad familiar, a imagen de la Trinidad, no debería romperse bajo ningún concepto".
4. Pandemia del hedonismo
Sobre esta pandemia, el Episcopado explicó que el hedonismo "arrastra a gran parte de la humanidad a los falsos paraísos terrenales (del alcohol, drogas, sexo, dinero fácil…), que en vez de felicidad producen mucho dolor y esclavitud".
"La persona que vive una sexualidad desordenada entristece al Espíritu Santo y se convierte en un ciego sin discernimiento, incapaz de descubrir los designios secretos del Dios de la historia. El hedonismo es sucio e inmisericorde, al final todo acaba en podredumbre y hastío", advirtieron.
Respuestas ante las "pandemias espirituales"
En su carta pastoral, el Episcopado señaló que la Iglesia está ante una nueva era que requiere de una respuesta apropiada: una nueva evangelización que debe ser "nueva en su ardor, en sus métodos y en su expresión", tal como lo indicó San Juan Pablo II.
Recordaron que la "buena noticia" del Evangelio "consiste en mostrar cómo, a pesar de la arrogancia y la violencia de los gobernantes terrenales, Dios siempre encuentra un camino para cumplir su plan de salvación".
En ese sentido, sostuvieron que para lograr superar la pandemia espiritual, se debe recurrir a San José, ya que "es una solución puesta por la Divina Providencia en el tercer milenio, porque él es el que ha provisto en Belén y entregado a la humanidad 'el Pan que baja del cielo', el único que sacia profundamente el hambre de los pobres".
"Cristo es la verdadera solución a este flagelo espiritual que azota a la humanidad", subrayaron.
Por otra parte, expresaron el regocijo con "los padres y madres de familia, y también con los hijos e hijas que, en nuestro país y en el mundo", pues "son auténtico reflejo de la Sagrada Familia de Nazaret".
Finalmente, exhortaron a fijar la mirada en San José, quien "continúa siendo el protector fiel de la Iglesia, de la familia cristiana y un modelo de vida para solteros y casados".
Sobre la Carta Pastoral
La publicación de esta carta se realiza en ocasión de la festividad de Nuestra Señora de la Altagracia, protectora del pueblo dominicano, celebrada cada 21 de enero.
El tema de este año surge a propósito del Año de San José que concluyó el 8 de diciembre de 2021, proclamado por el Papa Francisco en la conmemoración del 150 aniversario de la declaración de San José como patrono de la Iglesia Universal, y en el contexto de la celebración de los 100 años de la coronación canónica de la Virgen de la Altagracia.