El coordinador nacional del Movimiento Cristiano Liberación (MCL), Eduardo Cardet, rechazó la posibilidad de que Rusia despliegue armamento en Cuba, por ser una violación a la soberanía de la isla ante la cual calla el régimen de Miguel Díaz Canel.

El 16 de enero, Dmitri Peskov, secretario de prensa del presidente de Rusia, Vladímir Putin, no negó la posibilidad expresada por el viceministro del exterior ruso, Serguéi Riabkov, de desplegar infraestructura militar en Cuba o Venezuela, si es que Estados Unidos y la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) no aceptan sus demandas, entre ellas, no incluir a Ucrania, ni ningún otro territorio exsoviético en la alianza occidental.

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"Por supuesto, en el contexto de la situación que nos ocupa, Rusia está pensando en cómo garantizar su propia seguridad, pero para hablar de localizaciones específicas […] estamos

considerando diferentes escenarios", indicó. "Respecto a América Latina, no podemos olvidar que hablamos de países soberanos"; agregó.

Además, dijo que "la solicitud de Estonia [también una ex república soviética] de albergar tropas de la OTAN en su territorio es una prueba de que nuestras preocupaciones están

justificadas […] de que no somos nosotros la causa de la actual escalada de tensión".

En una declaración publicada el 16 de enero en el sitio web del MCL, Cardet condenó las recientes declaraciones de los líderes rusos.

"Aprovechando la 'debilidad' de las democracias occidentales, Putin continúa avanzando en el uso de la fuerza militar para expandir y consolidar el otrora imperio ruso", señaló.

Además, "de manera descarada y arrogante, desde el Kremlin se refirieron a la posibilidad de desplegar tropas en Cuba y Venezuela, pisoteando la soberanía nacional", dijo.

"Los regímenes totalitarios cubanos y venezolanos han guardado silencio cómplice", criticó.

La semana pasada, el viceministro ruso Riabkov declaró al canal de televisión RTVI, que "no confirma, pero tampoco descarta" la posibilidad de que se realice un despliegue militar; es decir, se envíen tropas o misiles, desde la isla de Cuba y Venezuela. Esto se dio en medio de una tensión internacional por la ocupación de fuerzas militares rusas en la frontera con Ucrania.

Además, advirtió que Moscú no esperará indefinidamente una respuesta y pidió a Estados Unidos y a la OTAN, conformada por 28 países, que también incluye Estados Unidos, que respondan por escrito a su demanda la próxima semana, señaló la agencia AP.

Eduardo Cardet expresó que "nosotros desde nuestra condición de ciudadanos, denunciamos y rechazamos tan grave expresión de violación de la soberanía nacional y que nos conviertan una vez más en punta de lanza en un conflicto ajeno a nuestros intereses como pueblo".

A inicios de diciembre de 2021, el viceministro Ryabkov dijo a un periodista que "si las cosas continúan como están, es muy posible que" la situación "podría llegar" a algo parecido a la crisis de los misiles de 1962, durante la Guerra Fría entre Estados Unidos y la Unión Soviética.

En 1962 la Unión Soviética desplegó misiles en Cuba, que entonces estaba dirigida por Fidel Castro. En respuesta, Estados Unidos impuso un bloqueo naval alrededor de la isla.

La crisis terminó cuando el presidente estadounidense John F. Kennedy y el líder soviético Nikita Khrushchev acordaron que Moscú retiraría sus misiles, a cambio de que Washington prometiera no invadir Cuba y retirar los misiles con armas nucleares de Turquía.

Antecedentes

El viernes pasado, la Casa Blanca dijo que el servicio de inteligencia estadounidense halló que Rusia envió agentes entrenados en la frontera con Ucrania.

Señaló que el objetivo sería realizar actos de sabotaje contra Rusia para culpar a Ucrania, en caso que Putin, decidiera invadir la ex república soviética.

Recientemente Rusia emplazó unidades del ejército en la frontera con Ucrania, y se estima que a la fecha habría 100 mil soldados con artillería y tanques. El 16 de enero, una delegación de senadores de Estados Unidos visitó Ucrania como muestra de apoyo, indicó AP.

La semana pasada, representantes de Estados Unidos y la OTAN han sostenido reuniones con Rusia, sin llegar a un acuerdo.

El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, ha solicitado a la OTAN que avale el plan de candidatura del país a la alianza militar.

Ucrania acusa a Rusia de apoyar a grupos separatistas prorrusos que se enfrentan a las fuerzas armadas ucranianas.

Entre Rusia y Ucrania hay un frágil alto al fuego desde los Acuerdos de Minsk II de 2015, firmados con la mediación de Alemania y Francia. El conflicto se inició en 2013, tras las

manifestaciones conocidas como el "Euromaidán", contra el entonces presidente ucraniano Víktor Yanukovich, quien tenía políticas prorrusas.

Tras la salida de Yanukovich y las protestas de la población prorrusa, Rusia intervino y anexó en 2014 de la península de Crimea y apoyó la proclamación de independencia de las regiones de Donetsk y Lugansk.

Si bien las luchas entre el ejército ucraniano y las fuerzas separatistas, apoyadas por el ejército ruso, duraron oficialmente hasta 2015, dejando más de 14 mil muertos, los enfrentamientos armados continúan en el Donbass -donde están las regiones de Donetsk y Lugansk-, y amenazan constantemente la tranquilidad de los pobladores de Ucrania.