La Iglesia en Paraguay celebró el 12 de enero el 97 aniversario del nacimiento de la primera beata del país, María Felicia de Jesús Sacramentado, conocida como "Chiquitunga", destacando el secreto de su gran amor hacia los más necesitados.

Para celebrar el acontecimiento, la Diócesis de Villarrica, lugar donde nació la religiosa carmelita en 1925, recibió una reliquia de primer grado que recorrió las calles de la ciudad, visitó lugares públicos y acompañó momentos de oración y Misas.

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En la Misa presidida por el Obispo de Villarrica, Mons. Adalberto Martínez, destacó que  "Chiquitunga nos sigue enseñando las maravillas del Señor, ella nos habla hoy proféticamente".

"Ella era mística adoradora de Jesús Sacramentado y lo encontraba en su corazón convertido en sagrario. Ese sagrario que tenemos todos al recibir a Jesús en la Comunión".

Pero además, la religiosa carmelita "encontraba a Jesús en el rostro de los pobres, en los niños, en los jóvenes, encontraba el rostro del Señor en los miserables, tocaba a Jesús en los enfermos, en los leprosos, en los tuberculosos, en los ancianos, eran ellos los que le daban alegría la entrega total de su ser".

La joven beata "se encontró con el verdadero amor de su vida, reconociéndolo especialmente en el amor crucificado y en los desfigurados rostros del crucificado a quien ella encontraba en el camino".

"Ahí está la llave y el secreto de ese gran amor que va más allá del amor humano", afirmó Mons. Matínez.

Tomando ese ejemplo, el Obispo de Villarrica alentó a los fieles pedir al Señor "que podamos abrazar como ella las pruebas cotidianas que nos da la vida, para participar de la vida y de las fuerzas del Resucitado".

"Quisiéramos pagar ese amor haciendo siempre el bien, reconciliándonos siempre entre nosotros. Aún en medio de todos los padecimientos, nadie ni nada pudo robarle a Chiquitunga la esperanza ni la alegría de sentirse plenamente amada por Dios", concluyó Mons. Martínez.

Luego de la Misa se presentaron distintos testimonios sobre el legado de la Beata Chiquitunga para la vida de los fieles.

La Diócesis de Villarrica recibió el 11 de enero la reliquia de la beata carmelita,que recorrió parroquias, hospitales y lugares históricos donde vivió Chiquitunga.

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Breve biografía

María Felicia Guggiari Echeverría nació en Villarrica el 12 de enero de 1925. Desde los 14 años se dedicó intensamente a la oración y al apostolado en la Acción Católica de Paraguay.

En ese periodo impartió la catequesis a niños, jóvenes trabajadores, universitarios con problemas, pobres, enfermos y ancianos.

El 14 de agosto de 1955, con 30 años de edad, respondió al llamado de Dios e ingresó a la vida contemplativa en la Orden de las Carmelitas Descalzas. Pasó a llamarse María Felicia de Jesús Sacramentado.

A los 34 años contrajo hepatitis y el 28 de marzo de 1959, un domingo de Pascua, falleció.

En 2010 fue declarada venerable por Benedicto XVI y el 23 de junio de 2018 fue beatificada por el entonces prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos, Cardenal Angelo Amato.