El Papa Francisco aseguró este 8 de enero que "nunca debe faltar la esperanza en el camino del creyente", pues "somos de Cristo".
En audiencia con los miembros de la Asociación San Pedro y San Pablo, que cumple 50 años realizando una serie de actividades voluntarias al servicio de la Santa Sede, el Santo Padre alentó a vivir siempre "con esperanza en el corazón".
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La Asociación San Pedro y San Pablo es heredera de la Guardia Palatina, una antigua unidad militar que sirvió en los Estados Pontificios y luego en el Vaticano hasta su disolución en 1971 por San Pablo VI.
"Somos de Cristo, somos injertados en él con el bautismo; en nosotros está su presencia, está su luz, está su vida. Caminemos, pues, apoyados en su Palabra: es palabra de vida", expresó.
El Papa señaló que este mensaje va especialmente "a los jóvenes: los animo a dar su energía a los necesitados y a convertirse en hombres capaces de encuentros verdaderos y sinceros".
El Papa Francisco alentó también a los miembros de la asociación a mirar siempre a Jesús, pues "queremos dar testimonio de nuestra fe anunciando que nuestra vida concreta encuentra su raíz en la humanidad de Jesús".
"Por tanto, conocerlo mejor, saber cómo condujo su vida, qué dijo, cómo se relacionó con los demás, es la base para descubrir cómo vivir humanamente hoy", dijo.
"Mirándolo nos sentimos cada vez más llamados a un servicio diario de acogida, de compartir, de escucha fraterna, de cercanía humana. Creo que así podemos mostrar, con hechos, la belleza y la fuerza del Evangelio", destacó.
El Papa agradeció a los miembros de la Asociación San Pedro y San Pablo por su "estilo de sonrisa" al atender a los visitantes del Vaticano, pues la sonrisa "favorece el encuentro" y "es un puente".
"Así es la vida: el arte del encuentro. El encuentro es como el oxígeno de la vida. Para ello necesitamos una cultura del encuentro", destacó.
El Santo Padre animó también a servir a los demás "con más humanidad", pues "si todos hemos cambiado un poco es porque nos hemos dado cuenta, con lo vivido, que lo que realmente importa para la vida son las relaciones humanas".
"Todos sentimos la necesidad de amarnos, de vivir más unidos, de escuchar palabras buenas y alentadoras que se dirigen unos a otros y, a su vez, darles un estilo de vida lleno de esperanza", expresó.