El 28 de diciembre, en el día que la Iglesia Católica recuerda y celebra la fiesta de los Santos Mártires Inocentes, el P. Raúl Ortiz Toro, llamó a los católicos a luchar juntos para vencer los flagelos como el aborto, que causa nuevos mártires inocentes en el mundo de hoy.
El P. Ortiz, director del Departamento de Doctrina y Promoción de la Unidad y el Diálogo (PUD) de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC), recordó en un video que los santos mártires inocentes son "aquel grupo de niños que murió sin culpa a manos del Rey Herodes, quien buscaba matar al Niño Jesús".
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En el video publicado en el sitio web de la CEC, el sacerdote explicó que pese a que el verdadero significado de la celebración es recordar a los Santos Mártires Inocentes, que dieron su vida por Cristo, "en ciertos ambientes se popularizó la costumbre de hacer bromas en este día".
Sin embargo, el P. Ortiz subrayó que para los católicos "lo más sensato" no es gastar bromas, sino "aprovechar la ocasión para incentivar acciones concretas en favor de la niñez", un grupo vulnerable que debe ser protegido de los males a los que se ven expuestos.
Entre estos casos, el sacerdote mencionó al flagelo del aborto, una práctica que lamentablemente es legal en muchos países y que ha cobrado la vida de millones de personas en el mundo.
Solo en Estados Unidos, fallecieron 62 millones de bebés en el vientre materno desde que se aprobó la ley de aborto en el país, dijo Jeanne Mancini, líder de March for Life (Marcha por la Vida), este año.
"Hoy en día los nuevos mártires inocentes sufren maltrato o muerte a causa del hambre, la violencia social e intrafamiliar, el desplazamiento, los abusos, el aborto, todos estos flagelos que el cristiano está llamado a derrotar", dijo el P. Ortiz.
Asimismo, el sacerdote llamó a los padres a que sigan el ejemplo de la Sagrada Familia, y construyan un hogar seguro para sus hijos.
"Las familias deben ser ambientes donde los niños y jóvenes no encuentren la hostilidad del aislamiento, del maltrato físico o la violencia psicológica, sino un hogar cálido y dialogante como el de Jesús, María y José, ejemplos de buena comunicación en los gestos, las palabras y acciones".
Finalmente, el P. Ortiz invitó a los fieles a reflexionar en torno a la siguiente pregunta: "¿Qué estamos haciendo para que nuestros hogares sean ambientes de afecto sincero y de paz?"