La Comisión Nacional de Familia de la Conferencia del Episcopado Dominicano (CED) solicitó al Estado crear un "Ministerio de la Familia que coordine, articule e integre las políticas públicas relativas a todos los miembros de la familia".
La solicitud fue presentada el 1 de noviembre por matrimonios y representantes de movimientos apostólicos de la Iglesia dominicana, con motivo del comienzo del mes dedicado a la familia y en medio de la celebración del "Año de la Familia Amoris Laetitia".
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El documento recomienda que el nuevo Ministerio de la Familia esté integrado "por el Consejo Nacional para la Niñez (CONANI), el Ministerio de la Juventud, el Departamento de Protección de la Vejez del Ministerio de Salud Pública, el Ministerio de la Mujer, el Consejo Nacional de los Discapacitados (CONADIS) y otras instituciones del sector público".
"Recordamos y reiteramos al Gobierno central, a las cámaras legislativas y a toda la población, que la familia no es objeto de apropiación de nadie, sino que las mismas familias tenemos el derecho a decidir sobre nuestros miembros y su futuro, teniendo presente que el bien de la sociedad depende del bien del matrimonio y la familia", precisa el comunicado.
Asimismo, los matrimonios reiteraron que "no se puede tolerar, en ninguna circunstancia, que se nos quiera imponer ningún tipo de agenda que atente contra la vida misma de la persona humana, ni siquiera de los aún por nacer", ya que "la Constitución, la Declaración Universal de los Derechos Humanos y el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos defienden el derecho a la vida en todas las etapas del ser humano".
"Tampoco podemos tolerar ningún tipo de ideología que desnaturalice y desarraigue nuestra propia identidad familiar. Somos, constitucionalmente, los responsables de la educación de nuestros hijos menores", aseguraron.
En ese contexto, la Comisión exigió al Estado "reconocer y garantizar el derecho al respeto y a la protección de la vida humana desde la concepción hasta la muerte natural".
También exigió la "promoción de programas auténticamente éticos y humanos de educación afectivo-sexual en los centros de educación de nivel primario y secundario, en los cuales los padres, madres y tutores de nuestros hijos nos sintamos respetados y representados en esa colaboración de tipo formal que nos ofrece la escuela para orientarlos dentro de una sana afectividad".
Entre otras cosas, se solicitó la creación de "una red de Centros de Asistencia Familiar para las familias con dificultades de convivencia, que contribuyan a proteger a las víctimas de la violencia, especialmente, a las mujeres, niños y niñas".
Así como "crear centros especializados para terapias de niños y niñas huérfanos traumatizados, sobre todo, aquellos que han perdido a sus padres o madres como efecto de la violencia intrafamiliar".
La Comisión señaló que el "designio divino de la familia está inscrito en la misma naturaleza, y a este nivel lo mismo da que uno sea creyente o no. Sus exigencias son reclamos a todos".
"Soñamos con el ideal de familia que sea una comunidad de vida y amor, formadora de personas, participante del desarrollo de la sociedad y participante en la vida y misión de la Iglesia, tal como nos animara San Juan Pablo II en su exhortación apostólica Familiaris Consortio. Los planes pastorales que desarrollamos, con la orientación de nuestros pastores, nos conducen a este 'ideal de familia'", recordó.
Finalmente, indicó que el conjunto de las familias dominicanas, "que entendemos están perfectamente representadas en este manifiesto, nos comprometemos a estar vigilantes para que en la república dominicana se acoja, se valore y se defienda la vida, la familia y el matrimonio en todas sus etapas y circunstancias".
