El Papa Francisco instituyó la Fundación para la Sanidad Católica por medio de un quirógrafo firmado el 19 de septiembre y difundido este miércoles 6 de octubre.
La función de la Fundación será "ofrecer apoyo económico a las estructuras sanitarias de la Iglesia". También "la inclusión dentro de la red de estructuras análogas y estructuras beneméritas de la Iglesia y con su misión exclusivamente benéfica según lo establecido por la Doctrina Social de la Iglesia".
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Además, el Papa erigió "en persona jurídica canónica pública y en persona jurídica civil la Fundación para la Sanidad Católica, como ente vinculado a la Santa Sede, de forma que pueda trabajar bajo su soberana autoridad y como ente instrumental de la Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica, que proveerá su gobierno y cuanto necesite para su funcionamiento".
"La Fundación", según dispuso el Santo Padre, "estará sometida a las leyes particulares y, en particular, a las normas especiales que regulan los entes de la Santa Sede, así como a su Estatuto, que apruebo al mismo tiempo".
La Fundación quedará "inscrita en la lista de los entes vinculados al estatuto del Consejo para la Economía y sometida a los controles y autorizaciones de la Secretaría para la Economía".
Asimismo, el Papa nombró presidente de la Fundación para la Sanidad Católica a Mons. Nunzio Galantino, presidente de la Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica. Nombró también a Fabio Gasperini, secretario de la Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica, como secretario de la Fundación.
Los miembros del Consejo de Administración nombrados por el Pontífice son Mariella Enoc, presidente del Hospital Pediátrico Bambino Gesù; Sergio Alfieri, profesor ordinario de Cirugía General de la Universidad Católica del Sacro Cuore; Chiara Gibertoni, director general del Policlínico Sant'Orsola-Malpighi; y Maximino Caballero Ledo, Secretario General de la Secretaría para la Economía.