El diputado brasileño Dionísio Lins presentó a la Asamblea Legislativa de Río de Janeiro (ALERJ) un proyecto de ley para autorizar al Poder Ejecutivo estatal a “expropiar el área de interés religioso donde se encuentra el Cristo Redentor”.
El Santuario Cristo Redentor y todo el terreno donde se encuentra la estatua en la cima del cerro del Corcovado pertenecen a la Arquidiócesis de Río de Janeiro, que se encarga del mantenimiento del monumento y de las celebraciones que se realizan en el santuario católico. En la base de la imagen también se encuentra la capilla de Nossa Senhora Aparecida.
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El área circundante pertenece al Parque Nacional Tijuca y es administrada por el Instituto Chico Mendes para la Conservación de la Biodiversidad (ICMBio), vinculado al Ministerio del Ambiente.
El 13 de septiembre el diputado Lins presentó el proyecto de ley 4855/2021, para establecer que el manejo del terreno donde se ubica el Cristo Redentor “será responsabilidad del Poder Ejecutivo, pudiendo también la Secretaría de Estado de Turismo contribuir a la organización del sitio”.
Además, se afirma que “la Arquidiócesis de Río de Janeiro podrá, donde exista una necesidad e interés legítimo, hacer acuerdos para la gestión del área”.
El proyecto se presentó luego que el rector del Cristo Redentor, P. Omar Raposo, tuviera dificultades para acceder al santuario el 11 de septiembre cuando iba a celebrar un bautizo en la iglesia.
Sobre este hecho, el Santuario Cristo Redentor publicó un “aviso de repudio a los actos hostiles del ICMBio contra la Arquidiócesis de Río de Janeiro”, y denunció que casos como este han ocurrido “de manera recurrente”.
En declaraciones al sitio web O Dia, Lins afirmó que “toda esta discusión sobre quién está a cargo del lugar ha estado causando daño no solo a los cariocas, sino también a los miles de turistas que visitan el lugar a diario”.
“Nuestro propósito es proteger la zona para que se mantengan los actos litúrgicos de todas las religiones”, agregó.
Lins publicó una nota aclaratoria el 18 de septiembre en la que dijo que ha recibido “sucesivos ataques masivos en mis redes sociales” porque los ciudadanos han entendido que el proyecto expropia el santuario de la administración de la Arquidiócesis de Río de Janeiro.
El diputado declaró que “la información que se transmitió a los hermanos católicos, lamentablemente, estaba completamente distorsionada, como si el objetivo del proyecto fuera despojar el monumento y liberar abiertamente cultos religiosos de las más diversas denominaciones”.
Lins afirmó que la pluralidad a la que se refiere es en relación al “acceso al monumento, que también es turístico”.
En otra publicación del 20 de septiembre, el diputado reafirmó que cuando habló de pluralidad fue en relación con “los actos ecuménicos de la Iglesia Católica” y señaló que la redacción del proyecto "sufrirá las mejoras necesarias".
Traducida y adaptada por Harumi Suzuki. Publicada originalmente en ACI Digital.