Los fieles del Santuario Diocesano de Frei Galvão, en Divinópolis (Brasil), conmovieron al P. Chrystian Shankar con una demostración de apoyo, luego de que el sacerdote fuera criticado por denunciar que una escuela de la ciudad está enseñando sobre "poliamor" a niños y adolescentes.
El poliamor es un neologismo que se usa para referirse a tres o más personas que tienen una relación amorosa simultánea, con consentimiento y conocimiento de todas las partes involucradas.
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Ante esto, el P. Shankar denunció durante una homilía que esta práctica, que daña a la familia y pervierte a los niños, estaba siendo enseñada en una escuela local. El video se hizo viral y trajo como consecuencia que personas y entidades vinculadas a la educación y psicología lo acusaran de haberlos ofendido.
Sin embargo, días después, antes de iniciar un momento de adoración en el santuario, los fieles decidieron expresar su apoyo al sacerdote con carteles de "Yo apoyo al Padre Chrystian".
En un video, se ve a uno de los fieles decir: "Estamos aquí, padre, nosotros y más de un millón de personas que lo siguen", y afirmó que el sacerdote es como un escalador "que siempre enfrenta cualquier montaña que aparece en su camino".
"Lo más hermoso de su sacerdocio es verlo enfrentar estas montañas de frente, con el pecho abierto. Incluso cuando llega el miedo, se atreve a superarlo", agregó en nombre de la comunidad.
El fiel resaltó que "en tiempos de frío y oscuridad", la comunidad estará aquí "para intentar iluminar un poco sus caminos y su vida", y pidió al sacerdote mantenerse firme, ser fiel y continuar su lucha, para que "continúe agradando al Corazón de Dios".
"A usted, padre, que ha ganado tantas cicatrices para hacer nuestra vida y nuestra familia más santa, nuestro más profundo y sincero agradecimiento", indicó.
Luego de las palabras, el P. Shankar inició la Adoración al Santísimo Sacramento y, ante Jesús Eucarístico, agradeció por la muestra de apoyo que, según él, "fue una respuesta de Dios".
"Hoy, en mis oraciones, rezaba pidiendo a Dios una señal si realmente estaba en el camino correcto. Mons. José [Carlos de Souza Campos, Obispo de Divinópolis] me dijo que la prueba es una señal de que vamos por buen camino. Y saber que ustedes también se suman a todo esto me da mucha alegría", agregó.
El sacerdote agradeció a todos por su muestra de apoyo y señaló que "a veces parece que soy un ejército de un solo soldado".
"Pero no es verdad. Tantos nos apoyan, oren por nosotros. Si en nuestra casa tenemos un poquito a Dios, nuestras familias serán mejores y tendremos mejores días para nuestros hijos", resaltó.
El sacerdote remarcó que es necesario respetar lo que las personas escogen para su vida, pero pidió que "dejen en paz a nuestros hijos, adolescentes", para que "puedan ser criados con tranquilidad en la familia".
"Mientras podamos inculcar en el corazón de los niños y preadolescentes los valores, las virtudes, el camino de Jesús, debemos hacerlo", añadió.
Durante su homilía el 18 de junio, el P. Shankar relató que una madre de la comunidad le comentó preocupada que su hijo había recibido clases en la escuela sobre "nuevas formas de amor y familia".
El sacerdote leyó el material sobre el "poliamor" que le entregó la madre del adolescente y advirtió sobre este tipo de enseñanza que busca destruir a la familia y pervertir a los niños.
El video de la homilía repercutió en las redes sociales, principalmente en la ciudad de Divinópolis, donde personas y entidades vinculadas a profesores y psicólogos acusaron al sacerdote de haber ofendido a los profesionales de estas dos ramas de estudios.
Tras la repercusión de las palabras del P. Shankar, el Obispo de Divinópolis se reunió con el sacerdote y le pidió que se retractara "de la manera universalizada, irreverente e irrespetuosa con que hablaba de los profesionales de la educación y la psicología, aunque tengan sus propias pedagogías y enfoques de su trabajo específico".
El 26 de junio, el P. Shankar se retractó y se disculpó en directo en su cuenta de Instagram ante "profesionales serios, buenos profesionales que se sintieron injustamente heridos" por su discurso.
También subrayó que lo sucedido fue "un juego muy bien orquestado", en el que "consiguieron con gran habilidad e inteligencia desviar el foco del tema, desviar el problema", tirando hacia el lado de la clase profesional, pero no hablar sobre la "gravedad de lo que fue enseñado".
Traducido y adaptado por Harumi Suzuki. Publicado originalmente en ACI Digital.