Con ocasión del próximo Domingo del Mar que se celebrará el 11 de julio de 2021, el Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral del Vaticano solicitó oraciones y seguridad para la gente que trabaja en el mar.
En un mensaje firmado por el prefecto, Cardenal Peter Turkson y el secretario del mismo dicasterio, Mons. Bruno Duffé, se encomendó a la Virgen María "Estrella del Mar" el "bienestar de la gente del mar, el compromiso y dedicación de capellanes y voluntarios" y se ruega a Nuestra Señora "que continúe protegiéndonos a todos de todos los peligros, especialmente del COVID-19".
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Además, en el texto se destaca que "durante toda la pandemia, los capellanes y voluntarios de Stella Maris siempre han estado al servicio de los marinos y pescadores" así como también se resalta que "están presentes en sus vidas, adaptan completamente su ministerio a las circunstancias cambiantes y abordan las necesidades espirituales y materiales de la gente del mar".
En 2012, Benedicto XVI exhortó a los capellanes y voluntarios de Stella Maris para que sean "apóstoles fieles a la misión de anunciar el Evangelio" que muestren "el rostro solícito de Iglesia que acoge y también que está cercana a esta porción del pueblo de Dios".
Asimismo, el mensaje vaticano para el Domingo del Mar 2021 lamentó que desde enero de 2021 "se han reportado 38 incidentes de piratería, incluidos 33 embarcaciones abordadas, dos intentos de ataque, dos embarcaciones disparadas y una embarcación secuestrada".
"Los marinos tienen derecho a realizar su trabajo sin correr el riesgo de ser secuestrados, heridos o incluso asesinados", advirtió el texto.
Por ello, solicitan "a todos los gobiernos y organismos internacionales que determinen soluciones duraderas al flagelo de la piratería, conscientes de la necesidad de abordar el problema fundamental de la desigualdad en la distribución de bienes entre países y la explotación de los recursos naturales" y piden a "los propietarios de buques deberían adoptar todas las medidas preventivas necesarias para garantizar la seguridad no solo de buques y su carga, sino especialmente de la gente del mar".
Finalmente, el mensaje vaticano recordó que se trata del segundo Domingo del Mar en el contexto de la pandemia y que durante este periodo "los barcos nunca han dejado de navegar de puerto en puerto entregando equipos médicos y medicamentos esenciales para apoyar la lucha contra la propagación del virus".
"Agradecemos a la gente del mar por su trabajo y nuestra gratitud se transforma en nuestra oración para que el Señor les conceda fuerza en momentos de debilidad, unidad en la diversidad, navegación segura y tranquila, y al final de su contrato, felicidad al reunirse con sus seres queridos", indicó el texto vaticano.