En vísperas de la fiesta de la Virgen del Carmen, te traemos un repaso de la historia de esta advocación tan venerada en el mundo, y una novena que la fundación pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN, por sus siglas en inglés) publicó para rezar a la Madre del Carmelo.
ACN recuerda que la Orden de los Carmelitas surgió precisamente en el Carmelo, “el monte donde numerosos profetas rindieron culto a Dios”, como Elías, su discípulo Eliseo y otras “personas que se retiraban en las cuevas de la montaña para seguir una vida eremítica”.
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“Esta forma de oración, de penitencia y de austeridad fue continuada siglos más tarde, concretamente en el III y IV, por hombres cristianos que siguieron el modelo de Jesucristo”, explica.
En el siglo XIII, el Patriarca Latino de Jerusalén “pidió a los ermitaños del Monte Carmelo que ordenaran su estilo de vida, lo cual se concretó gracias a los Papas Honorio III e Inocencio IV”, de manera que nació la “Orden religiosa de los Padres Carmelitas, que se extendió por el mundo tanto en su rama masculina como femenina”, precisa la fundación pontificia.
“En el siglo XVI, Santa Teresa de Jesús, Doctora de la Iglesia, es la reformadora del Carmelo descalzo reimpulsando la fuerza de su regla original, de oración y clausura. Y es así como se difunde hacia América”, resalta.
ACN explica que luego que el 16 julio de 1251, el Superior General de los Padres Carmelitas del convento de Cambridge (Inglaterra), San Simón Stock, recibió la visita de la Virgen María. Vestida con el hábito carmelita, “llevaba al Niño Jesús en sus brazos y en su mano el Escapulario”.
“Recibe, hijo mío, este Escapulario de tu orden, que será de hoy en adelante señal de mi confraternidad, privilegio para ti y para todos los que lo vistan. Quien muriese con él no padecerá el fuego eterno. Es una señal de salvación, amparo en los peligros del cuerpo y del alma, alianza de paz y pacto sempiterno”, le dijo la Virgen al santo.
Además, el devocionario de ACN recuerda que cuando los Carmelitas se vieron obligados a abandonar el Monte Carmelo por la invasión de los sarracenos, “se les apareció la Virgen mientras cantaban el Salve Regina, y ella prometió ser para ellos su Estrella del Mar”, razón por la que se le otorga este nombre a la Madre de Dios.
“Después de una larga interrupción de la vida monacal en la montaña, que dio ocasión para la expansión del ideal carmelitano por el Occidente, regresaron los religiosos del Carmen al Monte Carmelo, entre los siglos XVI y XVII”, agrega.
A partir del siglo XVI, el uso del escapulario del Carmen se extiende por toda la Iglesia. ACN indica que “el Papa Juan Pablo II, que era terciario carmelita, ha recordado en diversas ocasiones que vestía con devoción, desde niño, el escapulario del Carmen”.
“¡La Virgen del Carmen, patrona de la gente de mar, que confía su vida todos los días a la inestabilidad de las olas y del viento! Desde nuestro puesto de timonel de la barca de Pedro, cuando sentimos rugir la tormenta y vemos saltar ante nuestros ojos el furor de la marejada, que querría dar al traste con nuestro batel, alzamos la mirada, serenos y confiados, a la Virgen del Carmen y le pedimos que no nos abandone. Y aunque el infierno no cese en sus asaltos y la violencia, la audacia y el furor de las fuerzas del mal aumenten siempre, mientras contemos con su poderoso patrocinio jamás dudaremos de la victoria”, expresó el Papa Pío XII con ocasión de la clausura del Congreso Mariano nacional de Colombia, el 16 de julio de 1946.
Puedes descargar la novena de forma gratuita AQUÍ.
Este artículo se publicó originalmente el 5 de julio de 2021. Fue actualizado para su republicación.