Mons. Juan Antonio Reig Pla, Obispo de Alcalá de Henares, Madrid (España), decretó un "toque de oración" para que los días 25 de cada mes suenen las campanas de los templos de la diócesis para animar a realizar una oración por la defensa de la vida.
En un decreto publicado hoy 18 de junio, Mons. Juan Antonio Reig, Obispo de Alcalá de Henares, Madrid (España) aseguró que actualmente se han aprobado por los distintos gobiernos de España una serie de leyes "que tienen un claro sentido contrario a la defensa y promoción de la vida humana hasta su fin natural".
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La última de estas leyes es la ley de la Eutanasia, que entrará en vigor en España el próximo 25 de junio.
"Conscientes de la obligación que como pueblo de Dios tenemos de no permanecer impasibles ante la gravedad de los ataques que recibe la dignidad de toda vida humana", el Obispo de Alcalá estableció "un toque para la oración todos los 25 de cada mes desde los campanarios de los templos destinados al culto".
El decreto precisa que el toque de campanas debe "ser lento, no repique" y debe "llevarse a cabo a las 08:00 p.m o la hora más cercana que se considere oportuna".
El Obispo anima a que se explique a los fieles el sentido de este toque, que entra en vigor desde el 25 de junio de 2021 hasta el 25 de junio de 2022, "pudiendo ser prorrogado".
Con esta iniciativa, Mons. Reig Pla pretende invitar a todos los fieles "a que en comunidad oa solas, eleven a Dio su oración" por la protección y la defensa de la vida.
Y propone rezar esta oración:
"Oh Dios, Creador de todo bien, que has enaltecido a la criatura humana creándola a tu "imagen y semejanza".
Oh Dios, Padre de misericordia, que por la Encarnación de tu Hijo Jesucristo y por su muerte y resurrección nos ha redimido haciéndonos hijos tuyos y hermanos de todos los hombres.
A ti acudimos en este momento de aflicción y de oscuridad. Te pedimos que la luz del Espíritu Santo ilumine nuestras mentes y corazones para que , en todo momento, cuidemos de toda criatura humana desde su concepción hasta su muerte natural.
Enséñanos a servir y proteger con amor el don de la vida de todos tus hijos; que, por intercesión de la Virgen María y de todos los santos, cesen los atentados contra la vida humana, queden abolidas las leyes que provocan su muerte, y fortalezca en todas partes el amor y el respeto hacia los más débiles y vulnerables.
Concédenos ser, en comunión con todos los hombres de buena voluntad, el "pueblo de la vida" que celebra constantemente los dones de tu amor.
Te los pedimos por Jesucristo Nuestro Señor. Amén".