"Jesús compasivo nos salva" es el título de las Orientaciones Pastorales que guiarán el caminar de la Iglesia en Uruguay este 2021 y hasta el 2023.
Los lineamientos fueron aprobados por los Obispos y Administradores Diocesanos de la Conferencia Episcopal del Uruguay (CEU) durante la última Asamblea Plenaria celebrada en forma digital entre el 7 y el 10 de junio.
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Las orientaciones fueron trabajadas a la luz del texto bíblico del milagro de la multiplicación de los panes, que tiene "todo el sentido del compartir la solidaridad, algo clave en este tiempo", dijo el secretario ejecutivo de la CEU, Mons. Milton Tróccoli.
En ese sentido, la Iglesia se siente llamada a "multiplicar los panes y los peces" con la dificultad de la pandemia del coronavirus, que ha llevado a la reducción de la presencialidad, entre otras cosas.
En conversación con ACI Prensa, Mons. Tróccoli manifestó que el primer desafío planteado para el caminar de la Iglesia es el "anuncio más comprometido del Evangelio", sobre todo "frente al creciente agnosticismo y secularización".
"Las líneas pastorales van en esa dirección, por un lado, el testimonio y por el otro, anunciar a Jesús como pan de vida, que alimenta el sentido de la vida", dijo el también Obispo de Maldonado - Punta del Este - Minas.
Otro desafío es "fortalecer el sentido de comunión, fortalecer los procesos comunitarios que se han visto debilitados precisamente por la falta de encuentro presenciales".
En ese sentido, la Iglesia en Uruguay "ha crecido en este tiempo, se han multiplicado los servicios de ayuda a los más necesitados" y por ese motivo, necesita "repensar la pastoral social abriéndola al trabajo en redes, es decir, que la Iglesia pueda trabajar en conjunto con otras organizaciones sociales al servicio de los más necesitados".
El secretario ejecutivo de la CEA comentó que la Asamblea también trató el tema de la renovación de las normas básicas de la formación sacerdotal en el Uruguay que recae especialmente en el Seminario Interdiocesano.
"Se está trabajando en la actualización de las normas, con énfasis en la dimensión humana-afectiva de la formación", de manera que "los candidatos que ingresan al seminario puedan discernir en profundidad y reciban el acompañamiento para lograr una madurez afectiva y vocacional sólida, de modo que pueda vivir bien el celibato y todos los compromisos del ministerio sacerdotal".
Mons. Tróccoli manifestó que Uruguay está pasando por una "sequía vocacional", si bien "hay seminaristas y candidatos a la vida consagrada femenina y masculina pero, es muy poco para lo que necesita el país".
"Eso nos preocupa y nos alienta a realizar un trabajo más profundo en la pastoral juvenil y vocacional" como lo que se está haciendo durante junio en el mes vocacional.
Otro aspecto destacado por Mons. Tróccoli es el inicio de los cursos de capacitación sobre "Protección de menores y prevención de abusos sexuales" en las diferentes comunidades, instituciones y ámbitos de la Iglesia que trabajan con menores o personas vulnerables.
En la Asamblea Plenaria también se trató la implementación a nivel nacional de las normas en relación a la institución del ministerio de la catequesis; y se informó que el Vaticano está estudiando el presunto milagro atribuido al Venerable Siervo de Dios Mons. Jacinto Vera, primer obispo del Uruguay.