Al finalizar el rezo del Ángelus de este domingo 13 de junio, el Papa Francisco pidió rezar por la actual crisis humanitaria en Etiopía que ha expuesto a los más pobres al hambre.
"Hoy hay hambruna allí, hay hambre allí", lamentó el Papa al expresar su especial cercanía a la gente de la región de Tigray en Etiopía, "golpeada por una grave crisis humanitaria que expone a los más pobres al hambre".
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"Recemos juntos para que la violencia cese inmediatamente, para que se garanticen los alimentos y la asistencia sanitaria para todos, y para que se restablezca la armonía social lo antes posible", pidió el Papa a los numerosos fieles reunidos en la plaza de San Pedro.
Además, el Santo Padre agradeció "a todos los que trabajan para aliviar el sufrimiento de la gente".
"Recemos a la Virgen por estas intenciones", pidió el Papa y después recitó un Ave María junto a los presentes.
Recientemente cifras del Programa Mundial de Alimentos (PMA) indicaron que al menos cuatro millones de personas están padeciendo hambre severa en la región de Tigray, que se localiza en el norte de Etiopía.
El conflicto armado ha generado una grave escasez de alimentos en gran parte de la población de esa región. A pesar de eso, los grupos armados bloquean el acceso de ayuda humanitaria en la zona, denunció el PMA.
Por su parte, la Agencia de las Naciones Unidas para los refugiados (ACNUR) solicitó "que todas las partes involucradas en el conflicto protejan a la población civil, respeten la seguridad del personal que trabaja en organismos de asistencia humanitaria y permitan el acceso a las personas que la requieren".
A partir de noviembre de 2020, inicio del conflicto actual en esta región etíope, alrededor de 45.500 personas han huido hacia Sudán mientras que 96.000 personas refugiadas provenientes de Eritrea "se encuentran en cuatro campamentos en la región y que dependen por completo de la asistencia humanitaria", muchos de ellos son mujeres y niños.
Además, las zonas fronterizas "están abarrotadas debido al gran número de llegadas desde Tigray; en consecuencia, es alto el riesgo de propagación de enfermedades (con inclusión del COVID-19)", indicó ACNUR.