"La misericordia no es asunto de técnicas humanas, sino un don del Cielo", expresó el Arzobispo de Santiago de Chile, Cardenal Celestino Aós, en el primer encuentro online de la recién creada Vicaría Pastoral de la Misericordia.
La creación de la Vicaría de la Misericordia se realizó el 20 de marzo, como una respuesta concreta en este tiempo de pandemia, y será guiada por el P. Pablo García Huidobro.
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El 22 de abril se concretó el primer encuentro con la participación de unos cien agentes pastorales y fieles que desarrollan un servicio de ayuda y acompañamiento a los "enfermos, familiares de fallecidos, privados de libertad y personas que sufren agudas crisis en sus vidas", describe una nota de prensa del arzobispado.
El Cardenal Aós recordó las palabras de Jesús e invitó a los presentes a ser "misericordiosos, porque el Padre del Cielo es misericordioso", "tenemos que vivir relacionándonos como hermanos en la misericordia".
En ese sentido, el Cardenal Aós pidió que la vicaría "sea como un faro, un punto de referencia, un estímulo para animar a que toda nuestra acción pastoral esté siempre imbuida de este estilo de la misericordia".
"Les pido que con ilusión y alegría comiencen este camino y recen, porque la misericordia no es asunto de técnicas humanas, sino un don del Cielo", agregó.
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A su turno, el P. García recordó que la misión de la vicaría es fortalecer la atención y el servicio espiritual a los enfermos con el apoyo de capellanes, diáconos, religiosas y laicos.
También acompañar a las familias en el dolor ante la pérdida de un ser querido en los cementerios, apoyar en la sanación humana y espiritual de personas que han perdido el sentido de la vida, acompañar y servir a los adultos mayores, mostrándoles el rostro misericordioso del Señor y la cercanía de la Iglesia en sus vidas.
Asimismo, manifestar preocupación y solidaridad hacia los niños abandonados y vulnerables en hogares de menores y dar acompañamiento humano y espiritual a los privados de libertad.
Divididos en grupos de trabajo, los participantes dialogaron sobre la reorganización de las capellanías y el voluntariado de la pastoral de la salud en el contexto de pandemia del coronavirus.
También, intercambiaron ideas respecto al ingreso a los hospitales, la perseverancia en la oración, la participación de los jóvenes y el acceso de los sacramentos al personal hospitalario.