Junto con el inicio de la Cuaresma, fue lanzada una nueva edición de la campaña “Plato de arroz”, iniciativa de Catholic Relief Services (CRS) para ayudar a quienes sufren hambre y pobreza, especialmente en Centroamérica, que ha sido golpeada por la pandemia y los huracanes.
CRS es una organización de caridad creada por los obispos de Estados Unidos que desde 1975 lleva adelante la campaña “Plato de Arroz”. Esta iniciativa se despliega en todas las diócesis del país. El 25% de todos los donativos permanecen en la diócesis local y el resto se destina para ayudar a las personas más pobres y vulnerables en el exterior.
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En un comunicado, CRS indicó que la pandemia de coronavirus ha aumentado el desempleo y agravado la situación de hambre en todo el mundo”, donde las donaciones realizadas a la campaña están “salvando vidas”.
“CRS está trabajando con sus socios para proporcionar raciones alimentarias de emergencia en más de 30 países y promover la prevención del COVID-19”.
La directora de Acción y Contenido de Campañas de CRS, Beth Martin, señaló que “durante la Cuaresma, muchos católicos en todo el mundo eligen hacer un sacrificio”, que gracias a los materiales brindados por la campaña pueden convertirse en una ofrenda.
“Al renunciar a algo, como a la taza diaria de café, y poner ese dinero en la caja de limosnas de Plato de Arroz de CRS, los católicos pueden responder al llamado del Evangelio y atender a nuestras hermanas y hermanos más necesitados”, agregó.
Martin indicó que las donaciones “permiten a muchas familias alrededor del mundo superar los obstáculos que se les presentan”, especialmente con el aumento de la necesidad en el último año.
“El COVID-19 está aumentando el hambre y la desnutrición en todo el mundo, y varios desastres naturales han dejado a miles de personas sin hogar o sin cultivos para alimentar a sus familias y comunidades. Personas en todas partes del mundo están luchando por salir adelante”, resaltó.
La oficial de Comunicaciones de CRS, Beatriz Afanador, señaló a ACI Prensa que las limosnas que recibe el programa de Cuaresma son destinadas a las comunidades más vulnerables de los Estados Unidos y a los “más de 100 países donde Catholic Relief Services tiene presencia”.
“Estos recursos son dirigidos a programas que combaten el hambre y la desnutrición. Un porcentaje de la limosna de ‘Plato de Arroz’ se entrega a las diócesis de los Estados Unidos para ayudar a quienes sufren hambre en el país”, agregó.
Afanador resaltó que las donaciones serán particularmente importantes este año para los países en Centroamérica y lamentó la grave situación que atraviesa esta parte del mundo a causa de la pandemia y los huracanes.
“Desde hace 5 años, Centroamérica ha experimentado sequías consecutivas, que han devastado los cultivos de las familias rurales, dejándolas sin alimentos ni sustento. A esta situación se sumó el impacto económico de la pandemia del COVID-19, que dejó a millones de familias vulnerables sin empleo. Posteriormente, los huracanes Eta y Iota impactaron a Nicaragua, Honduras y Guatemala”, indicó.
Afanador señaló que cerca a la temporada de cosechas “los cultivos de miles de agricultores quedaron bajo el agua y sus hogares destruidos”. Indicó que estos cultivos “son la fuente de alimento de miles de familias, que al perderlos no tienen como alimentarse”.
Además, resaltó la importancia de una correcta alimentación, especialmente en los primeros 5 años de vida de los niños, donde su desarrollo es necesario para lograr “todo el potencial que Dios le ha dado”.
“Si un niño no se alimenta bien durante esta etapa, su desarrollo se verá truncado, esto incluye su desarrollo cognitivo. Un niño que se alimenta bien puede aprender. Los niños que tienen desnutrición y que no pueden acceder a suficientes alimentos tienen deficiencias en su proceso de aprendizaje”, indicó.
Afanador señaló que CRS invierte en programas de alimentación dirigidos a la primera infancia y escolares, “donde los niños más vulnerables pueden recibir comidas nutritivas en sus escuelas y así asegurar un rendimiento escolar óptimo”.
Finalmente, resaltó que la “limosna, junto con la oración y el ayuno, forman parte fundamental de la Cuaresma” y es compartir con el “Cristo sufriente” que está presente en los más necesitados.
“A través de ‘Plato de Arroz’, las familias católicas pueden reflexionar sobre la caridad y poner su fe en acción para transformar la vida de miles de comunidades vulnerables en el mundo”, concluyó.
Puede donar a la campaña AQUÍ.