Mons. Luis José Rueda Aparicio, Arzobispo de Bogotá y Primado de Colombia, envió un mensaje a los violentos en Buenaventura, en la región del Pacífico colombiano, y los exhortó a no asesinar ni masacrar más.
"Me uno desde Bogotá con mi hermano Obispo de Buenaventura, Mons. Rubén Darío Jaramillo, y quiero mandarle este mensaje, a través de RCN, a los violentos, a los que asesinan, a los que masacran a campesinos, a indígenas, a afrocolombianos en el Pacífico, que tienen armas en la mano, que creen tener la vida de los demás en la mano", dijo el Prelado al concluir la Misa que presidió el domingo 7 de febrero.
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"Les mando un mensaje a su corazón y a su conciencia: no asesinen más, no masacren más. Dejen en paz las familias del Pacífico", dijo Mons. Rueda.
"Déjense amar por Cristo, dejen que Jesús entre a su corazón y se van a dar cuenta de algo: el dinero y las armas, ese negocio ilícito, no los lleva por caminos de felicidad", exhortó el Arzobispo.
En los últimos días, según informa el diario El Tiempo, una guerra de bandas criminales atemoriza a la población en la ciudad portuaria de Buenaventura, una de las más golpeadas por la violencia en el país.
La violencia ha llegado a tal punto que en ocasiones se ha visto a hombres armados con fusiles en algunos distritos.
"Los enfrentamientos que amenazan a niños, adultos y adultos mayores los llevaron a abandonar sus casas con los pocos objetos que pudieron llevar, para desplazarse a otras zonas de la ciudad", dijo la Defensoría del Pueblo la semana pasada.
Se calcula que en total 156 familias, más de 650 personas, se han desplazado a causa de la violencia.
Semana.com informó por su parte que en los primeros 33 días de 2021 hubo 33 combates urbanos.
La primera masacre del año cobró la vida de 6 personas.
En enero de 2020 los homicidios fueron siete. Este año fueron 22. A eso se suma que 11 personas siguen desaparecidas.
Al concluir su exhortación, el Arzobispo de Bogotá les dijo a los violentos que "si quieren ser felices ustedes y sus familias, busquen a Cristo Jesús, él transforma su vida de violentos en constructores de paz".
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