El Obispado de Temuco (Chile) comunicó el 5 de febrero que el P. Darío Fuentes Cifuentes fue notificado por la justicia chilena de que será investigado por el presunto abuso sexual que habría cometido contra un menor de edad.
En el 2015 la Diócesis dio a conocer la recepción de denuncias en contra del sacerdote "relacionadas con paternidad, faltas al celibato y gestión económica", precisó el comunicado del Obispado de Temuco.
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En noviembre de ese año se inició una investigación previa y "de acuerdo a los protocolos de la Iglesia, junto a otras cautelares, se le suspendió del ejercicio público del ministerio sacerdotal".
Desde septiembre de 2016, luego de enviar los antecedentes a la Congregación para el Clero de la Santa Sede el sacerdote "enfrenta un proceso administrativo penal".
"A partir del 2017 se sumó otra denuncia por abuso sexual de un menor de edad, y posteriormente se tomó conocimiento de una nueva", agregó el comunicado.
"En razón de lo mencionado, el proceso canónico por las posteriores acusaciones consideradas delitos graves, fueron derivados a la Congregación para la Doctrina de la Fe".
"El Obispado de Temuco ha colaborado y sigue disponible a colaborar en todo lo que el Ministerio Público considere relevante para el esclarecimiento de la verdad y el establecimiento de la justicia. Junto con deplorar a su vez esta lamentable situación, pide con humildad perdón a las víctimas y se manifiesta cercano a su dolor, reiterando su disponibilidad a seguirles acompañando", escribió el comunicado.
El diario La voz de Pucón precisó que el fiscal Ítalo Ortega, formalizó ante el Juzgado de Garantía de Pucón al sacerdote "por hechos acontecidos entre el año 2011 y 2013 relativos a abusos sexuales" hacia un menor de edad en la localidad de Caburgua.
"En el tribunal se dio cuenta de la declaración de esta víctima que en ese tiempo tenía entre seis y siete años de edad y así mismo se dieron cuenta de otros antecedentes como peritajes de análisis de relato efectuados por el Servicio Médico Legal de Temuco como también de un análisis que se efectuó en una investigación canónica, además de declaraciones de familiares cercanos del menor", agregó el fiscal.
El fiscal solicitó la prisión preventiva del sacerdote, pero el tribunal lo dejó en libertad con prohibición de acercamiento o comunicación con la víctima, con arraigo nacional y firma quincenal en la 9º Comisaría de Carabineros de Pucón mientras se desarrolla la investigación en un plazo máximo de 180 días.
