Ayer 2 de diciembre, en la segunda sesión de debates por la legalización del aborto en Argentina, el abogado Néstor Sagués recordó a los diputados que "nadie puede ser privado arbitrariamente de su vida" y por tanto legalizar un "derecho" a eliminar al no nacido es una "aberración jurídica".
De acuerdo al cronograma, los 50 expositores a favor y en contra del aborto comenzaron sus intervenciones durante la jornada del 1 de diciembre en forma online, ante las comisiones de Salud, Legislación Penal, Legislación General, Mujeres y Diversidad, Acción Social y Salud Pública.
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La mañana del martes 2, el doctor en Derecho de la Universidad de Madrid, Néstor Sagués, denunció que es "increíble" que en el texto "no se aluda ni una sola vez a la persona que se está gestando", mucho menos se mencione sus derechos.
Indicó que esto parte de dos ideas anteriores: "La negación como persona y su derecho a la vida".
Refiriéndose a los autores del proyecto, dijo que "hay que tener coraje" para hacerlo sin tener en cuenta los tratados internacionales y normativas nacionales que reconocen la protección de la persona desde el momento de la concepción.
Esa negación a la vida que le otorga el "derecho" a una madre de matar su hijo por "voluntad" constituye una "aberración jurídica", aseguró el abogado.
En ese sentido, "no hay ninguna convención que claramente enuncie el derecho a la madre de privar al sujeto que está engendrando del derecho a la vida. Tendrá el derecho de espaciar los nacimientos tendrá el derecho de regular los nacimientos" pero eso no involucra "el derecho a la muerte".
Citando el Pacto de San José, Sagués dijo que "nadie puede ser privado arbitrariamente de su vida" y agregó que "la vida de una persona no puede estar sometida a la voluntad discrecional, a la voluntad libérrima, a una autonomía irrestricta de la progenitora", concluyó.
Lea la intervención completa AQUÍ.
A su turno, la directora del Instituto de Política Constitucional de la Academia de Ciencias Morales y Políticas, María Angélica Gelli, recordó que "la defensa de la vida comienza con la concepción y la protección de este derecho está expresamente reconocida en el sistema jurídico" argentino.
Además, denunció el eufemismo con que se trata el tema. "No se trata de una interrupción, porque lo que se interrumpe puede continuar, se trata de la supresión del embarazo y se trata de consagrar un derecho subjetivo a abortar", aseguró.
La abogada también alertó que el proyecto del aborto otorga el derecho a la objeción de conciencia individual de un modo "parcial, trunco y condicionado", ya que se "vulnera en términos absolutos la objeción de conciencia personal de todos los miembros de la organización".
En ese sentido, en la institución "existe la conciencia de sus integrantes y si ellos se reúnen con una cosmovisión respetable no puede imponérsele una obligación por parte del Estado que va en contra de esa cosmovisión, que es nada más y nada menos que la defensa de la vida", afirmó.
En ese sentido, "debiera considerarse expresamente la objeción de conciencia institucional", afirmó Gelli.
Porque el médico "sea o no sea objetor, es el que decide qué hace frente al paciente. No podemos obligarlo a que diga lo que haga la ley y vulnerar el propio juramento hipocrático", concluyó la directora de la academia.
Entre los expositores a favor de la vida que expusieron en la mañana del 2 de diciembre estuvieron: el Obispo Auxiliar de Buenos Aires, Mons. Gustavo Carrara; Martín Olivera Ravasi, ginecólogo especialista en medicina materno-fetal de la Universidad de Barcelona; Nicolás Laferriere, doctor en Ciencias Jurídicas y Especialista en bioética; Aníbal Bakír, Presidente del Centro Islámico de la República Argentina.
Debate de la legalización del aborto
La discusión del proyecto comenzó el martes 1. Hasta hoy jueves 3 de diciembre representantes provida y proaborto exponen ante las comisiones de Salud, Legislación Penal, Legislación General, Mujeres y Diversidad.
En un principio, se determinó que el dictamen de las comisiones saliera el viernes 4 y para que debatiera el pleno de la Cámara el 10 de diciembre. Sin embargo, el artículo 106 del reglamento de la Cámara de Diputados señala que en el caso de prórroga de sesiones ordinarias, las comisiones solo podrán emitir despacho de un proyecto de ley hasta "10 días antes de la fecha prevista para la culminación" de esa extensión.
Por ello, el Gobierno de Fernández "corrigió" el martes 1 la fecha de la prórroga de las sesiones ordinarias y las extendió hasta el 3 de enero de 2021 para cumplir con el cronograma de debate.
En el 2018 la tramitación en Diputados de un proyecto para despenalizar el aborto duró casi mes y medio. La rapidez con que los legisladores del Gobierno impulsan el proyecto actual, llamándolo "debate exprés", ha sido criticado por los representantes provida.
De ser aprobado, lo que se conoce como "media sanción", el proyecto de legalización del aborto pasaría al Senado para su debate.