El Gobierno de España decretó un nuevo Estado de Alarma, que previsiblemente durará hasta el mes de mayo, y entre las restricciones previstas afectará también al aforo de las iglesias.
Según informa la Archidiócesis de Madrid, el consejo de Ministros del pasado 25 de octubre el Consejo de Ministros anunció la entrada en vigor de un nuevo Estado de Alarma en España que da a la comunidades autónomas la posibilidad de establecer confinamientos perimetrales en todo su territorio y limita la movilidad nocturna entre las 11:00 p.m y las 06:00 a.m.
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En concreto en la comunidad de Madrid, el aforo en las iglesias queda reducido al 50% en toda la Comunidad y en las áreas que tienen mayor incidencia de casos de coronavirus éste se reduce a un tercio de la capacidad del templo.
Pero cada comunidad autónoma es responsable de decretar el aforo que considere para los templos, dependiendo de la mayor o menor inciencia de casos de covid en su región.
De esta manera, según la indicaciones publicadas en el Boletín Oficial del Estado se apunta que "se limita la permanencia de personas en lugares de culto mediante la fijación, por parte de la autoridad competente delegada correspondiente, de aforos para la reuniones, celebraciones, y encuentros religiosos, atendiendo al riesgo de transmisión que pudiera resultar de los encuentros colectivos" y que dicha limitación no podrá afectar en ningún caso al ejercicio privado e individual de la libertad religiosa".
Además, desde el Arzobispado de Madrid se recordó también que en todos los lugares es obligatorio el uso de mascarillas, las pilas de agua bendita continúan vacías y se ofrece gel desinfectante.
Además, el facultativo gesto de paz ha sido sustituido por uno sin contacto; la comunión se recomienda recibirla en la mano; se evitan los coros, reduciendo la música a un solo cantor; no se distribuyen hojas parroquiales ni ningún otro objeto, y el cestillo de la colecta no se pasa durante el ofertorio, sino a la salida de Misa.