El cantante canadiense, Justin Bieber, ha lanzado su nueva canción "Holy" (Santo), donde muestra cruces, habla del matrimonio cristiano como algo que agrada a Dios y marca su inicio en la música con mensaje cristiano.
La canción fue lanzada en septiembre y cuenta con la participación del cantante Chance the Rapper, y ya ha alcanzado el puesto número 3 en los Billboard 100.
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El video narra la historia de una joven pareja que pierde su casa y son acogidos por un soldado latino y su familia, y contiene varias referencias a la fe cristiana, como las cruces y gente orando.
La letra de la canción también habla sobre como la relación con su "esposa" se siente "santa en Dios" y anima a formalizar una unión bajo la bendición del matrimonio cristiano.
"Sé que no voy a dejarte como sé que Él no nos va a dejar. Sé que creemos en Dios, y sé que Dios cree en nosotros", señala.
En sus redes sociales, Justin Bieber ha compartido varias veces cómo la fe lo ha ayudado a salir de sus adicciones y ha resaltado que la canción "Holy" es una "nueva era" en su música.
"¡Yo quiero andar en los planes que Dios tiene para mí y no intentar hacerlo a mi manera! ¡Quiero dejar diariamente mis deseos egoístas para poder ser un buen esposo y futuro papá! Estoy agradecido de poder caminar con Jesús mientras el guía mi camino", indicó.
Bieber también ha hablado sobre la importancia de su matrimonio con la modelo Hailey Baldwin en su vida y el rol central de Dios en ella.
"¡Estoy comprometido por el resto de nuestras vidas a apoyarte para que seas la mujer que Dios te ha llamado a ser!", señaló en su mensaje de aniversario.
Justin Bieber inició su carrera artística en 2008 cuando un ejecutivo lo descubrió de manera accidental al ver un video de Youtube donde interpretaba temas de cantantes conocidos como Usher, que tiempo después se convirtió en su manager.
En 2009 lanzó su primer disco y en 2010 grabó una de sus canciones más conocidas, Baby.
Hace un año, Bieber señaló en su cuenta de Instagram que la presión que vivió con su estrellato infantil lo llevó a que, con 19 años de edad y "sin aptitudes en el mundo real", cayera en la adicción a las drogas.
"Comencé a consumir drogas bastante fuertes a los 19 y abusé de todas mis relaciones. Me volví resentido, irrespetuoso con las mujeres y furioso. Me distancié de todos los que me amaban y me escondía detrás del caparazón de una persona en la que me había convertido. Sentí que nunca podría darle la vuelta", agregó.
Bieber indicó que fue gracias a Dios, y a las "personas extraordinarias" que Él puso en su camino, que pudo dejar sus adicciones y convertirse en una mejor persona.
"Incluso cuando las probabilidades estén en tu contra, sigue luchando. Jesús te ama", alentó. "Sé amable hoy. Sé valiente hoy y ama a la gente hoy, no según sus propios estándares, sino según el amor perfecto e inagotable de Dios", concluyó.
