El Papa Francisco envió un mensaje al superior general de la Congregación de San Miguel Arcángel, P. Dariusz Wilk, con ocasión del centenario de su aprobación, y los invitó a ser "portadores de esperanza y futuro" a los niños y jóvenes indefensos.
Por este motivo, la Congregación celebrará un Año Jubilar.
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En su mensaje, el Santo Padre los animó a "continuar con convicción, alegría y fidelidad renovada el camino marcado por si fundador, Beato Bronislao Markiewicz".
El Papa destacó que el carisma de la Congregación es actual porque se "caracteriza por la preocupación por los niños pobres, huérfanos y abandonados, no deseados por nadie y a menudo considerados un desperdicio de la sociedad".
"Los invito a continuar con renovada ilusión en el compromiso educativo de quienes muchas veces nadie quiere acoger y defender, a través de escuelas, oratorios, casas familia, albergues y otras organizaciones asistenciales y formativas", dijo el Papa.
En esta línea, el Santo Padre destacó que "la educación humana y cristiana, especialmente hacia los pobres y en lugares donde, por diversas razones falta y no está adecuadamente garantizada por la sociedad" y añadió que los niños y jóvenes "necesitan continuamente formadores que los guíen con amor paterno y bondad evangélica en el crecimiento humano y religioso".
"Que en este Año Jubilar puedan cada uno de ustedes escuchar dócilmente al Espíritu Santo y dejarse moldear por él para renovar la necesaria comunión fraterna, de cara a una misión cada vez más fecunda", pidió.
En este sentido, el Santo Padre los animó a "no cansarse de escuchar el 'grito' que los niños y jóvenes indefensos tienen grabados en sus ojos" y a ser "portadores de esperanza y de futuro para ellos".
Para ello, el Papa dijo que es necesario "ser hombres de comunión, superar las fronteras, crear puentes y derribar los muros de la indiferencia" por lo que deseó a la familia religiosa "poder continuar la difusión del apostolado de San Miguel Arcángel, poderoso vencedor sobre los poderes del mal".
"Que la Virgen Santa y el Arcángel Miguel los protejan y sean la guía segura del camino de su Congregación, para que puedan llevar a cabo su proyecto de bien", concluyó el Papa quien aseguró su oración por cada uno y por las iniciativas de este Año Jubilar.
