El Cardenal Juan José Omella, Arzobispo de Barcelona y presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE) concedió una entrevista a la cadena COPE, en donde habló la importancia de la búsqueda de la concordia y la reconciliación y pidió a los políticos que aparquen los temas que desunen y busquen solucionar los problemas que realmente preocupan a la gente.
Sobre la Ley de Memoria Democrática, antes llamada Ley de Memoria Histórica, el Arzobispo de Barcelona aseguró que "en este momento hay una llamada en España y en todo el mundo a ponernos al frente y reconstruir la sociedad" y por eso pidió a los políticos que aparquen ciertas cosas para "serenar la sociedad y buscar lo que de verdad preocupa a la gente".
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Entre otros puntos, esta ley prevé la "resignificación" del Valle de los caídos y la salida de la comunidad benedictina que vive allí.
"Todo eso se dice y a la hora de la verdad hay que ver cómo jurídicamente se puede llevar a cabo", aseguró el presidente de la CEE y recordó que "esos temas tan polémicos no son esenciales en este momento, porque lo que nos preocupa ahora es salida de la enfermedad, el trabajo, la educación de los jóvenes…".
Además aseguró que estos temas "dividen y retrotraen a momentos difíciles". "Yo sé que hay muchas heridas en el pasado de la historia de España que nos pueden distraer de lo esencial", apuntó.
"¿Tanto preocupa a la gente que los benedictinos tengan que salir del monasterio? ¡Si están allí para rezar! Ciertamente se equivocarán en algunas cosas que habrán dicho, como nos equivocamos todos los humanos, pero están allí para hacer el bien. Busquemos lo que nos une, la concordia y la reconciliación es posible. Busquemos ese camino", subrayó el Cardenal Omella.
Aprobación ley de la Eutanasia
En relación con la posible aprobación de la ley de eutanasia en España, el Cardenal aseguró que "como presidente de la CEE, como ciudadano de a pie y creyente bautizado" está "por la vida".
"La persona mayor, como todo ser humano con limitaciones o enfermo, ama la vida y no ama el dolor y quiere que, de alguna manera, el dolor desaparezca y en esto tenemos tanto adelantado…", afirmó.
Por eso subrayó que "cuando un enfermo que es terminal le quitan el dolor y nota que la familia le quiere, que no le abandona, nota que los sanitarios le atienden con cariño, que lo cuidan… Ese hombre no quiere morir porque se siente querido" y recordó la frase de que "no hay enfermos incuidables aunque sean incurables".
Ley de Memoria Histórica
La Ley de Memoria Histórica fue aprobada en 2007, durante el gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero y establece una serie de medidas a favor de quienes padecieron persecución o violencia durante la Guerra Civil española y la posterior dictadura de Francisco Franco.
Entre esas medidas se prevé la retirada de monumentos, símbolos o nombres de lugares públicos relacionados con la Guerra Civil y la dictadura. Sin embargo, varios expertos la consideran una ley controvertida porque no favorece la reconciliación de los españoles.
Los monumentos de la Iglesia Católica quedan fuera de la aplicación de esta ley; sin embargo esto no ha sido respetado en ocasiones y se han retirado tanto cruces como nombres de calles relacionados con órdenes religiosas.
Valle de los Caídos
El Valle de los Caídos se construyó entre 1940 y 1958 como mausoleo de quienes lucharon en la Guerra Civil española. Es un complejo arquitectónico en donde se encuentra una abadía benedictina, que cuenta con una cruz, una escalinata, una explanada y una basílica.
Francisco Franco fue enterrado allí tras su muerte en 1975, así como José Antonio Primo de Rivera, creador de la Falange, el partido político con el que el dictador sustentó su régimen. Junto a ellos también reposan los cuerpos de casi 34 mil combatientes de la Guerra Civil de ambos bandos.
Se trata de un monumento controvertido, porque para sus detractores es un recuerdo del régimen franquista y la exaltación de la memoria de Franco.
En octubre de 2019 los restos de Francisco Franco fueron exhumados del Valle de los Caídos y trasladados en helicóptero al cementerio de Mingorrubio, Madrid.