La Iglesia en Bolivia renovó su compromiso como facilitadora del diálogo y la paz, a través del acompañamiento a los actores políticos que participarán en las elecciones presidenciales el próximo 18 de octubre.

Los 11 días de manifestaciones y bloqueos de caminos por parte de movimientos sociales que estaban en desacuerdo por la tercera postergación de los comicios presidenciales, tuvo su fin luego que la mesa de diálogo sectorial acordó respetar la próxima fecha de las elecciones.

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El P. José Fuentes, secretario general adjunto de la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB) explicó en conferencia de prensa que "la Iglesia busca la luz de cómo actuar en este difícil momento".

En ese sentido, la Comisión facilitadora del diálogo, compuesta por la Iglesia local, la ONU y la Unión Europea, se reunieron igual que en noviembre de 2019 para "actuar y acompañar a la Asamblea Plurinacional y partidos", expresó.

"Esta comisión facilitadora es un instrumento en Bolivia al servicio del diálogo, y ha aportado mucho a la pacificación, porque ha logrado confianza de todos los grupos", aseguró el P. Fuentes.

Además de la comisión, precisó, "es el trabajo de cada Obispo y sacerdote en cada una de las 600 parroquias que tiene Bolivia".

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"Somos una institución que va logrando que todos la puedan aceptar como instrumento de paz y diálogo, es percibida como una institución sin intereses particulares, sino que está al servicio de la búsqueda del bien común", dijo el secretario general adjunto de la CEB.

En la conferencia de prensa, el P. Fuentes también anunció la Asamblea Extraordinaria de los Obispos que se realizará entre el 19 y 21 de agosto y por primera vez en forma online.

En el encuentro, los obispos compartirán sus experiencias y dificultades en el trabajo pastoral durante la pandemia del coronavirus, en las cárceles y la migración.

Además, se tratará con especial atención la educación y la Pastoral Social Cáritas, ambos con protagonismo relevante durante la emergencia sanitaria.