El Obispado de Talca informó el 7 de agosto sobre el cierre del proceso administrativo penal contra el P. Luciano Arriagada Vergara por el delito de abuso sexual contra menores.
El proceso administrativo penal fue encomendado por la Congregación para la Doctrina de la Fe al Obispado de Talca luego de confirmar la verosimilitud de una denuncia realizada contra Arriagada el 9 de agosto de 2018.
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El decreto emitido el 3 de agosto estableció que las acusaciones por abusos sexuales contra menores "fueron probadas y se le impuso como pena la suspensión total del ejercicio sacerdotal durante cinco años y la prohibición perpetua de asumir servicios pastorales dedicados específicamente a niños y adolescentes".
"El decreto establece, además, otras medidas que apuntan al sentido penitencial, terapéutico y de reparación que persigue esta pena", precisó.
Al momento de la notificación, el P. Arriagada "comunicó su determinación de solicitar a la Iglesia la dimisión definitiva del estado clerical".
La sentencia de la Iglesia y la determinación del sacerdote fueron comunicadas a las víctimas. También, los expedientes del proceso "fueron entregados íntegramente" a la justicia civil.
En el comunicado, el Administrador Apostólico de Talca, Mons. Galo Fernández, hizo "suyo el dolor de las víctimas, de sus familias y de toda la comunidad que tanto ha sufrido por estos hechos que no se condicen con el ministerio sacerdotal".
Asimismo, reiteró "el compromiso de la Iglesia en Talca con la prevención de los abusos en todas sus formas y la búsqueda de ofrecer ambientes sanos y seguros para todos", concluyó.